miércoles, 2 de diciembre de 2015

Capítulo 51: Invasión de Citizen Parte 2: El despertar del Fénix.

Capítulo 51: Invasión de Citizen Parte 2: El despertar del Fénix.
Abrió los ojos, mientras a su alrededor, una serie de llamas cubrían el entorno que inundaba aquel abismo…
-Estoy en el infierno- manifestó Kyoto.
-Mmm… para mí es el paraíso…
Kyoto volteó para ver a una gigantesca ave de fuego que miraba tranquilamente.
-Oh, es el joven Kazuo Katekyo, hacía años no te veía Joven Señor, ¿a qué debo el gusto de su visita?
-Lo siento, pero no soy al que llama usted, me llamo Kyoto Katekyo, soy un hijo de Kazuo Katekyo…
-¿Con quién?
-Con Erika Aramis…
-Lo hacía casado con Lois Inverna jovenzuelo.
-De hecho, mi padre se llama Kazuo, mi señor…
-Tu padre, ¿Cuál es tu nombre?
-Kyoto Katekyo…
-Oh,  ya veo- dijo el ave mientras daba la espalda al chico- ¿Qué te hizo pensar que por ser descendiente de mi amo ibas a poder usar mi poder, humano desgraciado?
Y una columna de fuego se colocó frente al chico.
-Ni me importará tanto usar tu poder, maldita gallina inútil híper desarrollada- masculló el azabache.
-¿Quién te crees que eres maldito humano de pacotilla?
-Ja, no me asustas pollo, debo irme, ¿puedes indicarme la salida de este lugar?
-Andate de aquí niño, pero antes, ¿cómo diablos llegaste aquí?
-Ah, eso, solo me atravesaron el pecho con una lanza de Hielo y Tierra, nada del otro mundo, pero debo seguir con vida…
-¿Por qué no me lo dijiste antes, humano inútil?
-Porque estabas demasiado ocupado contando tus plumas, pollo rostizado…
-Te lo advierto humano…
-¿Advertirme qué, gallina?, ¡que me vas a rostizar?, adelante hazlo- masculló el chico tomando pose de batalla.
Y el ave de fuego lo miró fijamente.
-Uff, nunca creí que lo haría, Kazuo-sama, perdóneme- dijo mientras se daba por vencido- Tienes agallas muchacho, ¿quieres de mi poder?
-No estabas muy de acuerdo con prestármelo, ¿a qué se debe ese cambio de opinión?
-Oh, bueno, realmente, vi todo allá afuera, te sacrificaste por esa chica, muy parecida a Lois si me lo preguntas…
-¿Y qué con eso?
-Nada, solo algo más, trata de moderarte…
-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Yusei seguía de pie ante el evento, con una simple mirada de compasión…
-Debo decir que él se lo buscó, es eso, ¿o tú qué opinas, Sora-chan?
-Que fuiste extremo, pero estaba ocasionando problemas… sin embargo, creo que vengarnos de aquel que destruyó nuestro pueblo hasta las raíces era lo que teníamos que hacer- masculló la castaña.
-Hump, típico de ti, siempre pones esa clase de argumentos…
-Pues a la otra no te ayudo y ya- Sora escuchó una especie de quejidos ligeros pero bastante lastimeros- deja de lloriquear Inverna, solamente estas perforada de los brazos con las espinas de la Zarza, y sabes que si opones resistencia, las ramas llegarán a tu corazón, e involucionarán a raíces.
Ante semejante argumento, Melodi solo se relajó, esperando el final de la batalla entre los azabaches.
-Creí que darías más pelea, apenas liberé al Gigante de Hielo y ya estás para el desprecio, das pena Katekyo, ¿cómo es posible que seas el hijo de Kazuo, el Invasor?
Una pequeña llama rozó su mano, mientras despertaba en Yusei un interés.
-Creí que morirías.
Y el cuerpo de Kyoto se cubrió de fuego, mientras un par de alas de fuego surgían de su espalda y sus manos se convertían en garras.
-¿No vas a contestar?
Y Kyoto liberó un silbido de ave rapaz, que heló la sangre de sus compañeros, Yusei solo se volvió a cubrir de aura gélida.
-Horus, el Fénix, ¿eso es todo lo que tienes?- preguntó el azabache.
Y Kyoto solo silbó nuevamente, mientras…
-Atributo Fuego: Garra Ígnea.
Y el nuevo Kyoto rasgó al vacío, creando poderosas ondas de aire caliente que impactaron a Yusei.
-Vaya, sí que eres fuerte, pero ahora, debo acabar este trabajo Atributo…
-Ja, me subestimas Yusei, soy un maldito psicópata en potencia- gruñó el nuevo Kyoto- Y tú mocosa, si no sueltas a esa chica en este instante, te mueres.
-Ok, tú ganas Katekyo- masculló Sora liberando a Melodi- Yu-kun, no vuelvas a fallar.
-Atributo Hielo: Nova Glacial.
Una ventisca rodeó a Yusei.
-Atributo Fuego: Nova Ígnea.
El fuego comenzó a arder solo alrededor de Kyoto, dejando ver solo su silueta.
-PRIMER IMPACTO.
Ambos chocaron con los puños en un poderoso golpe.
-SEGUNDO IMPACTO.
Trataron de taclearse a la vez, impactando sus hombros.
-TERCER IMPACTO.
En el aire, Kyoto soltó una poderosa patada detenida por otra de Yusei, misma intensidad.
-IMPACTO FINAL: METEORO.
Y ambas auras se incrementaron, mientras tomaban impulso.
-Toma Ya…
Y se acercaron velozmente con las cabezas de frente, a su vez que una explosión acababa con las embarcaciones de los invasores.
-Retirada, Retirada- alertó el capitán del escuadrón.
Y todos se iban con velocidad, tratando de no ser alcanzados por la explosión de vapores.
Al finalizar las secuelas del impacto, un par de cuerpos caían inconscientes, maltrechos, y sin aura cubriéndolos.
-Alguien salve a los chicos- dijo Erika mientras llamaba al escuadrón médico.
-Descuida, en algún momento sus instintos les salvarán- masculló Kazuo mientras arrestaba a Sora.
-Espere, sabe que no puede tocar a una niña pequeña e indefensa…
-Creeré que eres pequeña, pero de indefensa no tienes nada, serás llevada a juicio.
-Al menos pregunte la razón por la que estamos aquí…
-Es más que Obvia, querían invadir Belladona…
-En parte, de Citizen escuchamos que ustedes invadieron Gruunland, la tierra de las eternas nieves, nuestro pueblo- dijo Sora mirando al suelo.
-Hay mucho que explicar niña, mientras tanto, piensa en prisión lo que vas a decir en tu defensa.
-No, por favor- murmuró Sora asustada.
-¿Disculpa?, eres una prisionera, lo que significa que no tienes elección.
-Pero Yu-kun, su cuerpo se sobrecargó
-¿Qué?
-Al liberar al Gigante de Hielo, sus nervios se atrofian, dejándolo maltrecho y con un tratamiento que solo yo sé realizar- dijo la chica con lágrimas en los ojos.
-Ah, maldita sea, odio cuando se ponen dramáticas- masculló el adulto- Bien niña, tú ganas, pero serán custodiados por nosotros en nuestro palacio.
-¿EN VERDAD ESTÁ LOCO?- Gritó Sora- ¿ACABAMOS DE MEDIO MATAR A SU HIJO Y NOS VA A LLEVAR A SU PALACIO?
-Claro- dijo Kazuo con calma- Después de todo, hay mucho que explicar, además, Kyoto también acaba de atrofiar sus nervios con lo que hizo, querer manipular al Fénix, es un milagro que no haya hecho arder toda Belladona.
-Puedo arreglar eso Kazuo, si me permites…
-No hasta que hablemos diplomáticamente.
---------------------------------------------------------------------------------------------------------------
En una habitación del Palacio Real, Kyoto y Yusei dormían en camas separadas, dispuestas para ese tipo de emergencias.
-¿Cómo está Kyoto, Inverna Melodi?- preguntó Kazuo.
-Muy mal, Sora tiene razón, no solo se expuso a atrofia de nervios, sus órganos están a punto de explotar por el calor concentrado, no es un hombre de goma para hacer tal barbaridad, los vapores siguen creciendo, traté de usar mis técnicas de Hielo, pero se derriten antes de siquiera tocarle- dijo Melodi mirando al suelo- Lo lamento tanto, Kazuo-sama.
-Descuida, no es tu culpa, ya veremos cómo retener sus…
-Hija- habló una voz detrás de ellos.
-Madre- Melodi corrió a los brazos de la dueña de aquella voz.
-Miyaah- Kazuo estaba sorprendido, en The Fantasy su hermana estaba de visita.
-Kazuo-nii, ¿Qué milagro?- preguntó la mujer.
-Eres la menos indicada para decir eso, Miyaah, pero no es tiempo de melancolías, necesitamos tus técnicas heladas para…
-¿Es tu hijo?
-Sí, es él…
-Mmm, debo decir que en persona es bastante apuesto, más de lo que me lo describían en casa- Miyaah codeó a Melodi.
-Ya basta mamá, más tarde hablamos de eso, ve a ayudarlo…
-En seguida, Atributo Hielo: Cúpula Gélida…-Una muralla de hielo rodeó el cuerpo de Kyoto, mientras Miyaah le veía con nervios- Con esta cúpula, la temperatura de Kyoto bajará gradualmente, poco a poco, para no causarle una hipotermia, a su vez, los vapores de su cuerpo estarán condensándose y…
-Yu-kun- dijo Sora con alegría.
En la otra cama, Yusei había abierto los ojos.
-Aghh, Sora, no me…
-Idiota, haces que tu hermana menor se preocupe- masculló la castaña- ¿qué será de ti cuando me case?
-De eso nada pequeña, primero me casaré yo, para que estés más segura- dijo el chico tomando su cabeza.
-Lo siento, sigue siendo doloroso pero…
-Ya me acostumbraré, ¿cómo está él?
-Mal, pero aún debemos dar explicaciones, estamos arrestados y somos culpables hasta…
-Lo sé, lo sé, hasta que se demuestre lo contrario, ¿Me equivoco, señor Kazuo?
-No, no te equivocas, ahora dime, ¿Quién los envió?
-Nadie, somos miembros del escuadrón de Citizen, buscando un momento para arreglar cuentas con un sujeto que incineró nuestro pueblo, hace más de 10 años- comentó el azabache.
-Prosigue.
-Sora y yo quedamos huérfanos, tras la Guerra de los Cien Fuegos, la cual acabó con mi país, nuestros padres fungieron como miembros del Escuadrón Médico, sin embargo, una técnica de llamas acabó con aquel escuadrón, por lo que, al finalizar la guerra, ningún adulto quedó con vida, solo los niños, posterior a la guerra, Citizen decidió hacerse cargo de Gruunland, añadiéndolo a su reino, y adoptando a los niños supervivientes, entre ellos, Sora y yo- dijo Dein.
-Debo suponer que piensas que la guerra por la cual perdieron a sus padres fue ocasionada por Belladona, ¿no es así?
-Solo intelectualmente, supe que enviaron un mensaje de ataque a nuestra ciudad- dijo Sora.
-Hump, realmente no fueron así las cosas, Belladona tenía conflictos con Norwind, el país a lado de Gruunland, desafortunadamente, nuestro mensajero fue interceptado y el mensaje robado, al final… se tomó una declaración de guerra, con avanzadas caóticas y destructivas, entre ellas, Gruunland, sin embargo, Belladona nunca participó en aquella guerra, después, Citizen ofreció su ayuda a Gruunland para detener a Norwind, en una batalla sin cuartel, poco después, Norwind fue invadida por Citizen y Gruunland dejó de ser útil para el reino militar, fue ahí donde decidieron declarar esa guerra.
-No… Citizen…
-Solo lo hizo por intereses propios, pero sabemos que serán sensatos….
-No creo que sea una sensatez lo que haré- masculló Yusei con dolor.
-¿Qué diablos?
-Me vengaré… y descubriré toda la verdad, eso haré…
Se levantó con facilidad, mientras veía a su alrededor…
-Y Kazuo, espero que Kyoto se recupere pronto… ha sido divertido pelear contra él, Sora puede ayudarle a curarse…
-No, ya Kyoto tiene médico personal- masculló la castaña- y si me dejas aquí, te odiaré con mi alma…
-¿Ah niña?, qué será de ti cuando me case- dijo Yusei.
-Pues ya me las arreglaré sola, mientras tanto, eres mi hermano, de alma, y de armas, debemos estar juntos y descubrir todo…
-Cierto, esto es por ti…
Se levantó mientras veía a la castaña con amistad, mucha amistad.
-Solo somos amigos Sora, ¿eso lo sabes?
-Sí, además, estoy fijada en alguien más.
-Oh, ya veo, vámonos.

Y se marcharon, dejando a Kazuo y Erika en sus cavilaciones.

Capítulo 115: Dos semanas para la guerra.

Capítulo 115: Dos semanas para la guerra. -¿Habrá llegado ya el mensajero?- preguntó Kyoto mientras realizaba algunas abdominales. -Esto...