martes, 11 de noviembre de 2014

Capítulo 9: Pelear con las Alas Rotas

Capítulo 9: Pelear con las Alas Rotas


Kyoto ignoraba olímpicamente a Melodi, y el dolor que ella sentía con su indiferencia, era tan cruel, tan despiadado y tan terrible que cualquiera pensaría que no era humano, y de hecho, ella leyó que una persona que no expresa sus sentimientos no es capaz de ser un humano, sino un demonio, sí, a ella le dolía, a él, bueno, él tenía salud.
-Kyoto-kun- hablaba la chica, llevaba así más de media hora sin respuesta.
-Dime- por fin una maldita respuesta.
-Bueno, yo, olvídalo.
-Dime, estoy escuchándote perfectamente- por fin tenía su atención.
-Te amo- dijo la chica.
-Yo también, siento eso mismo- contestó el chico.
-¿De verdad?- la chica tuvo un brillo en su mirada.
-Al final se descubre la verdad, ¿cierto?- fue la respuesta.
-Cierto, bueno, al final y al cabo, uno no puede volar con las alas de la esperanza rotas- explicó la peliazul.
-Esas mismas marcas en mi espalda lo delatan, me las hizo mi padre- dijo el chico.
-¿Tanto confías en mí que ahora te abres y cuentas tus penas?- dijo la chica.
-Bueno, yo quise volar una vez, pero ahora duele el solo imaginarlo- explicó.
-Te amo- finalizó la chica.
-Ok, mándame los resultados, esa investigación es muy importante- esperen, ¿en qué maldito momento él?...- vale, nos vemos luego, gracias- se quitó el auricular- decías Inverna-san.
-Olvídalo- ok, algo era algo…
Melodi volaba mientras él corría y saltaba por los arboles de la estepa, llegaron a un lugar completamente plano, la estepa en la noche era fría, así que Kyoto aprovecho para ir por leña y encender una fogata mientras Melodi vigilaba el área.
-Puño Brasas- dijo Kyoto mientras golpeaba la leña acomodada para que se avivaran las llamas.
Melodi estaba callada, escuchó más de la cuenta, mientras el Corría y ella volaba, solo lo vio pelear en el aire una vez y, en la secundaria antes del accidente, siempre hablaba de un terrible trauma, no sabía si preguntarle o quedarse en silencio.
-Hace un momento escuchaste más de la cuenta, Inverna-san- Dijo el pelinegro.
-Melodi, dime solo Melodi- explicó la chica.
-Da igual, eso no te quita lo Inverna- dijo el chico sin un ápice de compasión.
-Sí, escuche un poco de tu conversación por móvil- dijo la peliazul.
-Bueno, la verdad siempre sale a flote alguna vez, y te diré esto solo porque quiero que te alejes de mí, y la única forma de lograrlo es hablándote de cosas más grotescas acerca de mí- dijo Kyoto.
-Ya veré si lo hago- dijo la chica.
-Eres terca, bueno, te preguntarás, ¿por qué el amor de tu vida faltaba a clases de natación?- dijo el chico.
Flashback
-Sensei, un compañero no ha llegado- decía una pelinegra* en la piscina de la escuela- ¿no sabe lo que le pasa?
-Sí, de hecho, mandó su justificante, siempre ha estado asistiendo al médico escolar, creo que el agua le hace mucho daño, pero bueno, allá él, si no aprende a nadar no es mi problema- explicó el instructor de natación.
-¿Puedo ir a verlo?- preguntó la chica.
-Claro, después de todo, eres la campeona de nado sincronizado, no habrá problemas por una clase a la que no asistas- dijo el maestro.
La chica se vistió y fue a la enfermería, suponía que su amado estaba con Sara, ya que ella a esas horas tenía hora libre, sin embargo, ella sabía de sobra que se hacía una hora en enfermería por dormir por el efecto de los calmantes.
-Descuida, yo te protegeré- decía una castaña en la sala de enfermeros.
-Estúpidos calmantes- explicó el pelinegro, era él, era…
-Cállate niño, gracias a esas medicinas estamos aquí, solos… - dijo la chica mientras se bajaba el cierre del uniforme deportivo.
-No, aquí no Sara- el pelinegro se tapo los ojos, completamente rojo.
-¿No qué pervertido?, iba a sacar lo que me pediste, la barra de chocolate amargo- dijo Sara sacando un empaque sellado, suponía que era chocolate.
-Gracias, esas barras son muy raras de conseguir, lo único que venden las transnacionales son grasas vegetales- dijo el chico mordiendo el producto de cacao.
Golpe bajo, a Melodi le encantaban los productos de esas trasnacionales, caminó inconscientemente hacia él, quería verlo.
-Melodi, de los 4 ases, ¿Qué haces aquí?- dijo la chica para reír, un chiste ingenioso.
-Vine a ver a mi compañero, faltó a la clase de natación otra vez y me interesó venir a verlo.
-Ah, ¿la conoces, amor?- preguntó Sara al pelinegro.
-No, mi amada princesa- dijo el chico para besar a su novia.
Doble Golpe al Corazón, sabía que no podía decir nada, al final y al cabo, era cierto, no se conocían, más personalmente.
-Soy Melodi, Melodi Ryone, vamos a la misma clase, baka- dijo la chica muy enojada.
-Ah, la chica del taller de Idioma y Cultura Japonesa del colegio, la experta nadadora y gran bailarina- dijo Sara, quien sí la reconoció.
-¿La otaku?, con razón no se me había hecho conocida, dime, ¿cuál fue el último capítulo del manga de Naruto?- preguntó el pelinegro.
-Ustedes solo ven el anime, prefiero evitar los spoilers- dijo indignada la chica, ¿sólo por eso la conocía?
-Nosotros también, pero resulta que no lo vemos tan seguido- dijo Sara volviendo a posar sus labios sobre el pelinegro.
-Besas rico, pero debes evitarte eso, recuerda que no está viendo una niña- explicó el pelinegro.
Triple Golpe al Corazón, salió de ahí, pues otro más no lo resistiría, pero vio algo debajo de las sabanas, en la espalda del pelinegro que tanto amaba.
Fin del Flashback
-Son cicatrices- dijo el pelinegro- salieron cuando…
-Cállate, Baka- dijo la chica lanzándose hacia él, de forma muy violenta, estaba sentada sobre él, con las piernas alrededor del cuerpo del pelinegro, quien estaba ligera e imperceptiblemente sorprendido, ligeramente tenso –Te demostraré que soy una mujer, y que tú serás mi hombre- y lo besó.
Duró 1 minuto el beso, pues…
-Atributo Oscuridad: Sombra Control- arrojó a la chica a 3 metros de él- no sé qué tramas, pero no es gracioso, y eso de demostrarme que eres ahora una mujer, primero que nada deja de hablar como si conocieras el idioma…
-Baka damare, watashi wa hontōni anata o aishi te
-Que me calle, tú estás verdaderamente enamorada de mí, pero lamentablemente yo no siento lo mismo, no por ti, idiota, escúchame Inverna-san…
-Te daré otro beso, y dependiendo de tu reacción…
-Responderé por lástima, ahora, en cuanto a lo que viste ese día, son cicatrices, ya estarás feliz…
La chica no hizo caso a eso último, simplemente no pudo resistir el movimiento de esos labios que ella tanto ansiaba probar, Kyoto tenía algo maligno en mente, correspondió el beso de forma que a ella le gustara, quien ni tarda ni perezosa quitaba la larga y negra gabardina del pelinegro, dejando su polera y su pantalón negro, desajustó la camisa y empezó a frotar con sus manos la espalda del pelinegro, quien respondía a los besos tratando de provocar a la peliazul, quien al llegar a la parte alta de la espalda se detuvo.
-¿Pero qué carajos es?- dijo la chica acariciando una  y otra vez esa misma zona, imperfecta, 2 enormes líneas gruesas y largas además de irregulares se extendían por donde los omóplatos de Kyoto estaban alojados, el pelinegro sonrió satisfecho- Kyaaaaaa- gritó con repugnancia la peliazul.
-¿Qué?, ¿acaso no anhelabas tocarme?- la primera sonrisa se asomaba al ver esa reacción.
-¿Qué carajos hiciste?, ¿Qué te pusiste?, Sí, fuiste tú- aseguró la peliazul.
-Fue padre, él las puso ahí- se quitó la polera dejando a la vista su espalda, en ella 2 enormes cicatrices hundidas aparecieron en la piel del chico.
-¿El padre que yo conozco?- preguntó aterrada Melodi, el que ella conocía como padre de Kyoto se veía muy bueno para cometer ese acto de crueldad.
-No me conoces bien, fue el que tuve desde que tengo memoria hasta la primaria, estúpida- dijo el chico volviendo a su seriedad.
-¿A qué edad?- preguntó furica Melodi.
-eso no importa- contestó Kyoto.
-Oh, claro que sí importa, se trata de ti, contéstame- exigió la chica.
-Siete Años, ¿ya estás feliz?- contestó restándole importancia.
En efecto, muy chico para soportar tal carnicería cometida en su contra, tal vez había hecho algo que no agradaba a su padre, pero nada lo justificaba, maltrato infantil e intento de homicidio, sí, prepararía una orden de aprehensión.
-Según Erik Erikson, las personas aprendemos a odiar o a amar a los 5 años, además, yo me lo busqué.
Un niño de 7 años que ya sabía odiar, ¿qué seguía?, ¿un padre enfermo, neurótico, lunático y con diversas frustraciones.
-Asesiné a mi “hermanito”- ahora sí lo había visto todo, un chico loco, paranoico, sádico, traumatizado y asesino, y ella estaba enamorada de ese mismo chico- era 3 años mayor que yo, y yo siempre era el objetivo de sus bromas infantiles y muy pesadas, y mi padre siempre nos comparaba.
-¿Lo odiabas?- preguntó casi afirmando.
-¿a quién?, ¿a padre por hacerlo?, ¿A mi Hermanito?, ¿a madre por no defenderme?, no para nada, los amaba mucho- sarcasmo en toda la extensión de la palabra- hice solo lo que tenía que hacer hace mucho tiempo, destrozar su amada familia unida.
-No creo que un niño de 7 años pueda desintegrar una familia.
-Pero un niño de 7 años obligado a madurar sí puede hacerlo, fue genial, los bramidos del cerdo obeso de mi hermano, las constantes súplicas desgarradoras por parte de mamá, llega ese maldito sujeto, padre, diciéndome hijo del demonio, yo le dije que era un ángel caído, que si me mataba, me haría un favor, pues recuperaría mis alas y volaría, lejos de él…
-¿Y luego?- preguntó la chica temiendo lo peor
-Técnica Ilusoria: Sueño viviente de Recuerdos- dijo el chico mirando a Melodi.
La peliazul estaba en una fundidora, en ese lugar vio a un adulto dirigirse a una caldera con 2 varillas, las cuales sacó con guantes de protección térmica, estaban al rojo vivo, después de eso se acercó a un niño pequeño amarrado a una de las columnas, desnudo de la cintura hacia arriba.
-¿Kyoto-kun?- preguntó la peliazul.
-no te escuchará, estamos en un recuerdo, si fuese un viaje espaciotemporarl no verías lo que vez y tratarías de salvarme- dijo el pelinegro secamente.
El hombre se acercó al pequeño y tentó su espaldita.
-Aquí están- y dicho esto pegó las varillas en la piel del pequeño, provocando que gritara amargamente.
-Detente, para- gritaba desesperada Melodi
-¿Qué parte del no te escucharán no entiendes?
-Sácame de aquí- rogó la peliazul.
El chico aún sufría mientras que Melodi tapaba sus ojos y sus oídos, ver sufrir al amor de su vida le estaba pasando la cuenta.
Sin embargo, lo peor estaba por venir.
-Tus alas ya son mías, y no podrás hacer nada por recuperarlas, solo muriendo podrás tenerlas de vuelta- dijo socarronamente el adulto.
El rostro del pequeño se mostraba indiferente, pero una pequeña comisura se formó en sus labios, volteó a ver a su padre y le lanzó una mirada asesina, en esa mirada había algo que Melodi no conocía.
-¿qué clase de ojo es…?
-Ni idea, solo sé que tengo el Catalyst desde que fui revivido, en cuanto a ese ojo, ni la más mínima idea, solo recuerdo un ardor terrible en ambos globos oculares.
Al mirar a su padre, el pequeño lo miraba sádicamente.
-Devuélvame mis alas- gritó el niño.
-No te pongas exigente mocoso.
-Devuélvame mis alas- gritaba más alto el niño.
-Mátame si quieres que te las devuelva.
-Si eso es lo que desea
Y el cuerpo del adulto empezó a arder en la fundidora, parecía una combustión interna, pero el pequeño Kyoto no dejaba de verlo.
Salieron de la ilusión.
Caminaron en silencio el resto del trayecto, un muy incómodo silencio.
-No quiero tu compasión, no me busques, no me hables, puedes irte tú y tus sentimientos directo al carajo.

martes, 28 de octubre de 2014

Capítulo 8: Inverna Vs Katekyo.

Capítulo 8: Inverna Vs Katekyo.
-Todo comenzó- empezó Ride- cuando las primeras descendientes de los Inverna nacieron, sus nombres eran Lira y Lois Inverna, pues bien, en el otro bando, había nacido el primer Katekyo, su nombre era Kazuo, como el XTAR de la quinta generación, pues bien, Lois Inverna y Kazuo Katekyo se amaban, sin embargo, había 1 ley en cada familia, muy distintas y que crearon conflictos, en el lado de los Inverna la ley era que nunca se entregaba a la hija menor antes que la mayor, es decir, Lois era menor que Lira por solo 2 minutos, en el caso de los Katekyo, la norma era que el descendiente podía escoger a su mujer, no se la imponían, eran más justos que los Inverna, pues bien, ya aclarados ambos puntos, puedo empezar, Lois y Kazuo se dieron cuenta que ambas familias iban a formar una alianza, los portadores del Catalyst y las portadoras del Ojo Glacial, el fruto de un hijo entre ambas familias sería capaz de superar a ambos padres, tanto en poder como en habilidades, todo iría a viento en popa hasta que los Inverna dieron por sentado su Ley, diciendo que no podían permitir que Lois se casara con Kazuo, explicándole que podía casarse con Lira Inverna, que estaba locamente enamorada de él pero el de ella no, y después podría casarse con Lois Inverna, sin embargo, esto no le pareció a los Katekyo, defensores de la monogamia, y dijeron que el trato no podría hacerse debido a los contras hallados dentro del maldito documento, Lira sí quería casarse con Kazuo, pero él no con ella, él seguía amando a Lois y Lois estaba muy enamorada de él, eran la pareja perfecta, hasta que Lira intervino- dijo el peli plata para tomar un vaso de agua.
-¿Qué hizo Lira?- preguntó Rode interesado.
-Pues en una noche se coló como sirvienta del clan, ofreciéndose a llevar el jugo nocturno de Kazuo, que consistía en Extracto de Uva, Jamaica Hervida y Jugo de Limón, eso elevaba enormemente las defensas de los Katekyo- volvió a contar el peliplata- en el trayecto, Lira echó unos polvos para dormir a Kazuo, el cual, al tomar el jugo, cayó completamente dormido. Los Inverna buscaban con locura a Lira, mientras ella dormía en los brazos de Kazuo, al amanecer, el Katekyo se vio en la cama desnudo, junto a la chica que, él pensaba, era Lois, sin embargo, él era capaz de identificarlas por algo, Lois tenía una cicatriz en su mejilla izquierda, provocada por Lira en su niñez, pues él notó que la chica no era Lois, a la cual despertó bruscamente.
-Supongo que eso le colmó la paciencia a Kazuo, siendo que no creía a donde llegaría la locura de Lira- interrumpió el Castaño.
-No solo eso, la chica se levantó indignada, pidiendo auxilio a los guardias de la casa, siendo que los Inverna estaban en la mansión, al ver a su padre, Lira fingió que Kazuo había abusado de ella, también aprovechó que Lois estaba ahí para decirle que en verdad estaba con su hermana por lástima, pues nadie la querría con esa enorme cicatriz.
-¿Fue enjuiciado?- preguntó casi asegurando el castaño.
-Por parte de su familia, fue exiliado, por parte de los Inverna, lo obligaron a casarse con Lira, que para rematar, según los documentos historiales de la cruenta batalla, era estéril, Lira siempre envidiaba a Lois, quien era más refinada, delicada, amable, servicial, podía tener hijos, tenía el amor de Kazuo, a pesar de estar casada con él, ella sabía que Kazuo amaba a Lira y que Lois seguía amando a Kazuo.
-En verdad creo que esa es toda la historia- explicó Rode.
-No, resulta que los Katekyo, gracias al Catalyst, podían ver si una mujer era estéril o fértil, pues según el documento, los Katekyo decían que una mujer fértil tiene una corriente constante y normal de Aura en su vientre, mientras que las mujeres estériles carecían de esos conductos precisamente en esa zona, cuando se enteraron de que Lira tenía un hijo se indignaron completamente, podía estar exiliado, pero eso no evitaba que la sangre noble de un Katekyo se contaminara, resulta que Lira forzó a Kazuo y Lois a tener relaciones y concebir un hijo frente a ella- explicó el peli plata.
-Ni tan obligados- dijo Rode.
-No, Lira dijo que eliminaría toda evidencia, Lois fue obligada a tener al hijo, pues al terminar el embarazo, ella la terminaría y el pequeño crecería conociendo a su padre Kazuo y a su madre Lira, como compensación Lira le permitía ver la tumba de Lois a Kazuo- dijo el peliplata- Lira estaba completamente loca, tenía un trastorno obsesivo compulsivo, imagina que hicieron los Katekyo al enterarse de la jugada de Lira.
-Supongo que intentaron llevarse a Kazuo y al pequeño- predijo Rode.
-Así es, solo que antes de poder hacerlo, los guardias de La familia Inverna trataron de pararlos, pero no pudieron contra el gran ojo sagrado Catalyst del maestro, quien al no ver respuesta por parte de Lira, declararon la Primer Guerra Fría, se llamó así pues eran los manipuladores de Hielo, los Inverna, contra los fríos y analíticos Katekyo, causando muchas bajas por parte de ambas familias, eso no evitó que Lira se volviera más loca, pues huyó del pueblo llevándose al pequeño.
-¿Y Kazuo?- preguntó el castaño.
-A él lo encontraron atravesado en la lápida de Lois, no aguantó más y se arrojó dando un salto, diciendo que moriría junto a ella, al hacer eso, Lira vio una luz bajando del cielo, era su hermana Lois diciendo que la perdonaba, ante eso, Lira arremetió contra el cuerpo de Kazuo gritándole que se levantara, que aún tenía que hacer muchos hijos para ella, pero vio como el alma de Kazuo se encerraba en una esfera junto a la de Lois, desapareciendo en el firmamento.
-Pobre, supongo que ya estaba más allá del límite.
-Al finalizar, encontraron al niño en los brazos de Lira, quien yacía en el lago, ahogada y congelada, tal y como adivinaron los Katekyo, ese niño sería superior en todo a sus padres, quienes deben descansar en paz pues han tenido mucho que hacer- dijo Ride.
-¿Cómo es que esto no sale en los libros de historia?- preguntó Rode.
-Porque es casi fantástica, ¿olvidé mencionarte que los Katekyo manipulaban la Oscuridad y que los Inverna el Hielo?, por eso no aparece en la historia, es algo que se cree un mito.
-¿Cuánto tiempo tiene la historia?
-350 años, el que la contó fue de hecho el sobreviviente de la muerte de Lira, se le conoce como Katekyo Inverness, de hecho, es el primer XTAR de la historia.
-Tú que sabes más de esto, supongo que él ha creado a los XTARS, ya sabes, la primera generación, ¿hasta ahora cuántas Inverna ha habido desde la primera generación?- preguntó Rode.
-Pues de hecho, han sido familias diferentes, pero la única Inverna que conozco es Melodi-san, Kyoto es un manipulador de la Oscuridad y del Fuego, pero algo más oculta, creo saber qué- Ride sacó el diario de su padre Akashi- de acuerdo al diario de papá, él hizo un viaje en el tiempo con mamá, además de que según uno de sus compañeros murió en batalla y otra compañera fue asesinada, papá fue compañero de un tal Kazuo Katekyo, atributos Oscuridad y Agua, se casó con Erika Aramis, atributos Metal y Fuego, y dice que ella estaba embarazada y que sí dio a luz a un varón-dijo Ride.
-Y si dice que papá hizo un viaje en el tiempo, entonces el bebé también lo hizo, además de la transmisión genética por parte de los padres, algo me dice que tenía atributos- predijo el castaño.
-Sí, de hecho el bebé era…- Ride calló un momento, dando a entender que era muy traumatizante saber eso.
-¿Qué ocurre hermano?- preguntó Rode.
-El bebé era de atributos Oscuridad y Fuego- dijo Ride analizando esa noticia.
-Entonces quieres decir que si el bebé viajó por el tiempo a la vez que papá y mamá, y nos concibieron a nosotros, quiere decir que Kyoto Katekyo…
-¿Es mucho mayor que nosotros?- preguntó Ride.
-A parte de eso, la generación anterior se adelantó por la Segunda Guerra Mundial, él debe tener algo así como- hizo cálculos- 70 años de edad- dijo Rode
Ambos analizaron la noticia, hasta darse cuenta que se habían desviado del tema.
-Oye Ride, ya nunca me dijiste que provocaba esa frialdad de Kyoto hacia Melodi- dijo Rode fastidiado.
-Oh, cierto, bueno, creo que lo hace pues al no tener otra explicación, cree que Melodi es la encarnación de Lira Inverna, si te das cuenta, ambas llevan un nombre referente a la música, Melodi se escribe Melody, melodía, la Lira se usa para crear música, melodías, esa es una, otra, Lira manipulaba el Agua y el Hielo, Melodi también puede hacerlo, y para rematar, Melodi quiere a Kyoto pero Kyoto no la quiere, ya son suficientes razones, de un momento a otro ella enloquecería- dijo el peliplata.
-Entiendo, pero eso significa que si Kyoto vuelve por esa chica, la tal Sara, ¿la historia puede volver a repetirse?- preguntó el castaño algo asustado.
-Lo dudo mucho, Melodi es algo desequilibrada de la mente, pero no le impide usar la razón, sería demasiado si ella quisiera pelear contra la encarnación de Lois, pero por si acaso, debemos proponernos algo- dijo el peliplata.
-Estaba pensando en evitar que ella y él, sobre todo ella, tengan una relación, es más, debemos extinguir todo rastro de amor de ella hacia él- interrumpió el castaño.
-Precisamente en eso pensaba yo, alejar esos sentimientos de su mente para que no se repita la historia- exclamó el peliplata.
-Oye hermano, ¿nosotros tampoco podemos tener sentimientos hacia alguien verdad?- explicó el castaño.
-Claro que no Rode, menos por las siguientes, tengo entendido que nuestras familias tampoco llevan una buena relación, pero aún así eso lo tenemos más que claro, sin embargo…- alcanzó a decir Ride.
-Olvídalo, yo cumpliré mi palabra- exclamó Rode para irse del lugar.

-Las mellizas Aura, Windy Blizzard y Mindy Blizzard no tienen la culpa de nada- explicó Ride.

martes, 21 de octubre de 2014

Capítulo 7: Llegada a Australia.

Capítulo 7: Llegada a Australia.
Al despertar Kyoto dentro del jet privado de Xtars, se encontró con la (no tan*) desagradable sorpresa de que estaba recostado en el asiento, su almohada eran la piernas de Melodi quien lo acariciaba tiernamente mientras dormitaba, eso enfureció a Kyoto.
-Te he dicho que tengas paciencia, el amor puede llegar si es que llega, tarde o temprano te darás cuenta de una de dos, si yo era el indicado o si era otro aquel que llenará tu corazón.
-Pues si pusieras tu granito de arena no sería mucho tiempo, además, quiero que seas tú el indicado- dijo la peliazul con una sonrisa.
-Ya el tiempo lo dirá, mientras tanto mantente al margen, ¿quieres?- dijo el chico con un dejo de molestia.
Melodi solo bajó la cabeza con tristeza preguntándose que había hecho ella para ser tratada así, nunca de los nunca había lastimado a Kyoto, pero por alguna extraña razón, él la trataba así.
-Oigan chicos, ¿Cuánto falta para llegar?- preguntó Kyoto sin interés, según.
-Estamos sobrevolando Sídney, Australia, de ahí tomaremos un vehículo con dirección al desierto, para así poder ir a por las mellizas Aura- dijeron los gemelos.
-¿Más chicas?- dijo el pelinegro ligeramente sorprendido.
-Así es- contestaron escuetamente los gemelos.
-Demonios, de veras que si en este equipo soy el único hombre me mato, en serio me mato- dijo el chico sin emoción alguna.
-Mínimo haz algo de drama fingido- dijo Ride.
-No puedo, ya lo dije, tengo mis razones…- contestó el azabache cansinamente.
-Sí, ya sabemos que tienes mucho dolor como para sonreír- contestó Rode escuetamente.
-Pero hay otra razón- añadió Ride.
-Cierto, si muestro emociones o sentimientos antes mis oponentes, esos mismos sentimientos se convertirán en mis debilidades, podrían aprovecharse de ellos para sacar ventaja- contestó Kyoto con seriedad.
-¿Para todos, incluidos tus amigos?- preguntaron los gemelos.
-El grupo de los 4 magníficos son los mejores representantes de la institución, nunca nos reunimos para comer, platicar, tomar alcohol, solo somos los mejores, tenemos al Rapero, la Bailarina, la Acróbata y el Dibujante, además, tenemos los títulos en los mejores deportes, Melodi en Nado Sincronizado, Soren en Artes Marciales, Natsuki en Gimnasia y Yo en Ajedrez, pero solo somos eso, como lo mencioné, los mejores-dijo Kyoto.
-Entonces no son tus amigos- concluyeron los gemelos.
-Ni siquiera conozco el significado de esa palabra- dijo a las espaldas de los chicos antes de retirarse de la cabina.
Melodi estaba sentada, reflexionando, era cierto, el grupo de los 4 Magníficos no eran más que “el arma secreta” de los torneos inter-escolares, pero nunca se reunieron como el grupo que eran, lo que era peor, iban en el mismo salón, eso debía facilitar las cosas entre ellos, tal vez no.
-Es de mala educación escuchar conversaciones ajenas, Inverna-san- fue el gélido comentario de Kyoto.
-Deja de hablarme con ese respeto, dime Melodi- a ella le dolía aquella indiferencia.
-Sea como sea, ahora espero que me entiendas, no quiero nada que ver contigo, espero quede claro- fueron las palabras venenosas del azabache.
-No quieres exponernos, quieres protegernos- dijo la chica sin determinación.
-Así es, daría mi vida porque ustedes protejan el mundo- dijo el chico sin emoción.
-Yo daría mi vida por ti- agregó la chica.
-No
-¿Eh?
-No quiero… ser salvado… por una mujer… más que por machismo… es por amor propio, bueno, por orgullo, ni siquiera sé que es el amor propio- dijo el chico sin cambiar su semblante, muy típico de él, de pronto bajó la mirada- vamos, ni siquiera sé si es amor lo que siento por Sara o solo un capricho.
-Descuida, ya la verdad iluminará tus ojos- trató de animar Melodi.
-Gracias por tus palabras, de verdad- el chico decía fríamente.
-De nada, para eso estamos los AMIGOS- dijo la chica con una sonrisa.
Kyoto se levantó, no quiso saber nada más del tema, amigos, bah, si en el pasado estaban peleados unos contra otros, ¿por qué ahora ser amigos?, ya no entendía nada, su paranoia y su esquizofrenia no eran de mucha ayuda, al contrario, fortalecían la duda, aunque el desenlace era el mismo, tarde o temprano lo apuñalarían por la espalda.
-Hemos llegado chicos, el Aeropuerto internacional de Sídney está abajo, de ahí tomaremos un helicóptero para ir por el siguiente miembro- Dijo Ride.
-Abróchense sus cinturones, el descenso puede ser algo conflictivo- Agregó Rode.
Kyoto estaba al fondo de aquella nave, con la mirada seria, para variar, sin una mueca en el rostro, para Melodi eso era más doloroso que la falta de aire por la presurización, al ver a la ventana, en vez del Aeropuerto, se habían quedado en el gran desierto rojo que caracteriza a Australia.
-Lo sentimos chicos, este lugar era la autentica parada, ya que las mellizas Aura están en esta localización, que pasen feliz noche- dijeron los gemelos.
Había pasado tiempo que no checaba su calendario, Kyoto Katekyo lo revisaba, para darse cuenta de que ese mismo día, era su cumpleaños, decidió salir a tomar aire fresco, no se esperaba a lo que venía.
-Feliz cumpleaños Kyoto-kun- gritaba una peliazul muy eufórica mientras le daba un abrazo.
-Gracias Inverna-san- contestó Kyoto con frialdad.
-¿Qué?, solo gracias, no esperas algún regalo, algo- pregunto indignada la chica.
-Bueno, en realidad no espero nada de nadie, ok, lo admito, espero algo de ti- dijo Kyoto.
-¿Qué?- preguntó Melodi algo relajada.
-Que te alejes de mí, si no es para cumplir misiones no te quiero cerca de mi- contestó el chico para levantarse y dirigirse a la zona de acampar de los gemelos.
Llegaron a una tienda de campaña donde, en efecto y para fortuna del frío Kyoto, los esperaban los gemelos.
-Kyoto-san, quítate tus pesas- dijo Ride con fastidio.
-Bueno, como digas, pero antes de quitármelas, ¿por qué debo hacerlo?- preguntó con seriedad el chico.
-Porque requerimos que uses tus habilidades al máximo, entre ellas tu rapidez- dijo Rode.
-Está bien.
El chico salió de la cabaña para quitarse unas marcas de su cuerpo, y en menos de 1 segundo estaba de nuevo adentro.
-¿Cu-cuánto ca-cargas Kyoto-kun?- preguntó Melodi impactada por la velocidad que había ganado el chico.
-Solo recibo peso de 800 kilogramos, me permite mejorar mi agilidad y resistencia, aunque me falta mejorar un poco mi rango, según mi sensei, debo tener una velocidad de 12500 kilómetros por segundo.
-Tanta velocidad terminará por modificar tu masa corporal- explicó Ride- o bueno, eso dice la teoría de la Relatividad**.
-E=MC2, es decir que energía es igual a la masa por la velocidad de la luz al cuadrado, no hay teoría que diga que a 12500 metros por segundo sea una gran velocidad- explicó Kyoto con seriedad.
Melodi seguía impactada, con esos 800 kilogramos había alcanzado una velocidad de 800 kilómetros por hora, aún estaba muy lejos de la meta, pero ese era un enorme avance.
-Bueno, los llamamos para la siguiente misión, las Mellizas Aura- explicaba Ride sacando dos cartas de información.-Atributo Viento y Cristal, Windy Blizzard, 16 años, creo que tú los acabas de cumplir hoy, Kyoto-chan- dijo Ride en burla.
-Precisamente, así como creo que quiero que confirmen algo, nunca me ha gustado que me llamen niño, ni pequeño, ni ninguno de sus sinónimos o traducciones, por lo que les perdonaré ese chan que han agregado a mi nombre.
-Muy bien, lo sentimos, bueno, ahora su hermana gemela, Atributo Psíquico y Cristal, nombre Mindy Blizzard, igualmente tiene 16 años, y son las guardianas de este enorme país- explicó Rode para después suspirar.
-Bueno, es hora de pelear por mi libertad, Melodi, haz equipo conmigo, Ride, por favor trae mi juego de ajedrez***, esta misma noche cumpliré esa maldita misión.
Tal y como el pelinegro había requerido, se le llevó su juego de ajedrez, el chico de la enorme gabardina abrió el juego, acomodó solo 4 fichas, 2 reinas, un alfil y una torre.
-Bueno, de acuerdo a las ventajas y desventajas en movimientos de cada ficha he descubierto al menos 12 formas de vencerlas, de esas 12 solo 3 son útiles si no queremos matarlas- dijo como si nada el pelinegro, pero a los demás les dio escalofrío esa enorme honestidad.
-Ok- exclamaron los gemelos.
-Y otra cosa, quiero que Melodi se quede aquí, tengo la extraña sensación de que arruinará todo en un instante- dijo fríamente el chico.
-Pero yo soy de mucha utilidad, bueno, contra la chica que manejará el viento te podía ayudar- se trató de ayudar la peliazul.
-Pero hay una experta en ilusiones, he sabido que los que usan el atributo Psíquico manejan bien las ilusiones, podrían hacerme aparecer de cierta forma engañosa a tus ojos, mejor me retracto, no te necesito, Inverna-san- dijo el chico sin una pizca de sentimientos.
-Está bien, solo no tardes mucho- explicó la chica al borde del llanto.
Mientras tanto Ride y Rode solo secreteaban.
-Creo que ya sé el por qué no se llevan bien- dijo Ride en susurros.
-¿Por qué?- preguntó Rode.
-Es algo que va más allá de familias, algo así como un Romeo y Julieta, solo que los Katekyo aún no superan eso y los Inverna siempre buscaron una especie de alianza- dijo el peli plateado
-¿De verdad?- preguntó con interés el castaño.
-Kyoto, ceo que deberías llevar a Inverna-san contigo, después de todo, es un trabajo en equipo- dijo Ride.
-Está bien, vámonos Melodi.
La peliazul solo asintió.
Al salir ambos chicos los gemelos quedaron solos.
-Ahora sí explícame eso de Romeo y Julieta versión Katekyo e Inverna.
-Pues bien….
*: Explico esto, ¿a quién no se le haría agradable dormir en las piernas de una mujer, más cuando está bien torneada? Solo a Kyoto.
**: La teoría de la Relatividad hablaba acerca de crear energía llevando algo a la velocidad más alta que es la velocidad de la luz, sin embargo, no solo se crearía electricidad, sino una alteración en el espacio tiempo.

***:Kyoto usa mucho el ajedrez para crear estrategias, siempre lo ha hecho para que, en este caso, él como alfil tome la delantera mientras que la torre se encargue de la vigilancia.

jueves, 2 de octubre de 2014

CAPÍTULO 6: Primera misión colaborativa.

CAPÍTULO 6: Primera misión colaborativa.
Al día siguiente los gemelos estaban dispuestos a despertar a los reclutas, primero fueron a por Kyoto, quien amanecía con unas ojeras muy notorias, aunque la verdad esa sería la primera y eterna vez que vieran esas ojeras, mientras que Kida padecía de la resaca, pues para calmar el dolor que Kyoto le había causado por su indiferencia y su crueldad (imaginen que un francotirador apuntara directo a su corazón y disparara) no le habían dejado muy buen sabor de boca, así que compro en secreto una botella de Dobel para quitarse esa imagen y esa crueldad de su mente.
-¿Eres un Humano?- le preguntaba Kida a Kyoto, ya que ella sabía que él no podía vivir sin sus 8 horas de sueño.
-Sí lo soy, pero ahora no es tiempo de ponerse sentimentales, Ride y Rode nos llamaron para cumplir una misión, la verdad ya se habían tardado y estaba bastante aburrido, QUIERO DESCUARTIZAR A ALGUIEN- dijo el chico mientras una sonrisa sádica se formaba en su boca.
-“Al menos ha sonreído”- fue el pensamiento de Kida- ¿Piensas que me puse ebria por ti?, jajaja, ni que estuvieras tan bueno.
-Lo que digas- fue el escueto comentario de Kyoto.
-Bueno chicos, creo que deben saber cuál es la misión actual, un sujeto llamado Crane Bonny* está buscando el Gato de oro de 24 Kilates, algún problema o comentario…- alcanzó a decir Ride.
-Esa joya está en mi casa, en medio de la selva, ¿Crane lleva algún armamento?- preguntó furiosa Kida.
-Una enorme maquina incendiaria y…- Rode no dijo más.
La chica salió del punto de reunión a una velocidad sobrehumana, Crane era su último objetivo, destruirlo sería como si toda la maldad de Brasil se acabará, así de fuerte era el asunto, Kyoto no lo comprendía, de hecho, lo único que hizo fue ponerse sus audífonos para escuchar Breaking the Habit** Linkin Park y seguir a la chica como si no quisiera.
-Debes ponerte serio mocoso, mira que se trata de un patrimonio natural, su destrucción no ayudaría en nada a evitar el calentamiento global, así que mueve el…- la chica estaba furica, pero no recibió respuesta, fue cuando al detenerse, vio que el muchacho tenía sus audífonos -quítate esa mierda y escúchame- ahora sí estaba furica.
El chico aceleró para encontrarse con el puño de un pirata esquelético, tenía pinta de ser el capitán.
-Aléjate de aquí, ahora- dijo el chico activando su V2 del Catalyst.
-Oblígame- fue la escueta respuesta del pirata.
No se habló más, el chico corrió hacia el pirata para patearle el rostro, después, el pirata sacaba su espada, ahora Kyoto estaba en desventaja.
-Sin espada eres inútil contra mí- dijo aquel sujeto con la intención de atravesar a Kyoto- la espada demoniaca de los 3 infiernos es invencible.
Kida sacaba su espada para detener el impacto de aquella otra espada y defender a Kyoto, pero fue detenida por aquel chico, quien se dejó atravesar por la técnica mortal del Pirata.
-Espada Demoniaca: Primer Infierno***: Agujero del descontrol- dijo el sujeto al tiempo que su espada, que había atravesado al chico en su corazón, aumentara su grosor, haciendo el hueco cada vez más grande.
-Kyoto- decía la chica en sollozos, pues el mismo llanto le impedía reaccionar.
Kida vio caer al chico brutalmente en el bosque mientras la sangre brotaba cual fuente, la peliazul corrió hacia el ahora cadáver para verlo morir, juntó aura curativo en sus palmas pero ya era algo tarde.
-Kida, salva a tu bosque, cree en ti y en que puedes hacerlo- dijo el chico mientras cerraba sus ojos dándole paso a la muerte.
La chica dejó de llorar para elevar su furia al máximo, de pronto, todo el fuego emanado pro las maquinas usadas por aquel pirata se extinguían al paso de una ola enorme.
-Atributo Agua: Ira del Mar: Ola Rabiosa- decía la chica perdiendo el control de ella misma.
-Ahora veo que has elevado todo tu potencial, vaya que era cierto lo que me dijo aquel sabio: “Si matas a alguien, la persona que más lo quiso lo vengara, y si lo consigue, tus seres queridos se vengaran de ella, dando paso a un ciclo de odio y venganza lleno de rabia e incomprensión”, tú eres nada más ni nada menos que la persona que está llevando todo tu potencial como lo que eres: una Inverna- dijo aquel fuera de sí.
-Crane Bonny, conozco tu leyenda, una eminencia en los 7 mares, pero el tesoro del Gato Tora se quedará para siempre en este bosque como su guardián, por lo tanto- decía la chica sacando una daga ligera- si es necesario unirme a Kyoto en el más allá, lo haré para salvar este bosque: Atributo Agua: Técnica de Sacrificio: Deshidrata…- alcanzó a decir la chica.
-Eres patético Crane Bonny, quisiste perforarme el corazón- la voz que interrumpió era tétrica y tenebrosa- te demostraré que mi poder es inmenso, y que es imposible que muera de un golpe al corazón, porque no tengo corazón- dijo la nueva voz.
-El patético eres tú, si supieras como he tardado en destruir este bosque, te darás cuenta de que soy invencible- decía el pirata.
-Bueno, creo que es hora de despertar: Un…Dos…Tres…Despierta- dijo la voz.
De pronto se dieron cuenta de que el caos armado en realidad era una ilusión, al voltear a ver a Kyoto, este tenía la gran herida causada.
-No es posible, tú estás muerto- dijo Kida impactada.
-Si me amas, no me mates, te aprecio como una gran amiga, espero que entiendas eso, ahora tú, Crane Bonny, se te imputan los cargos de robo, asalto, destrucción e invasión, ¿Cómo te declaras?- preguntó el pelinegro con una nueva faceta, de la gabardina emanaba un aura si bien era aterrador, era también inmenso.
-Me declaro culpable- contestó sin importancia Crane.
-Muy bien, como no tienes defensa que alegar: Atributo Oscuridad: Tercia de Jueces****: Sellado Infernal de 5 Vías.
De la nada un pentagrama salía de las manos de Kyoto, rodeando al fantasma que poco a poco hasta dejarlo momificado.
-Eso no me hará daño: Piratas, al ataque- gritaba Crane mientras se desataba de la atadura creciendo de tamaño.
-Kyoto, su técnica de las sombras de la muerte- dijo Kida.
-Preocúpate más por ti, estorbo- dijo Kyoto mientras sus manos emanaban algo de aura oscuro- cuando te diga, cubre el bosque, demuéstrame que no eres un estorbo, demuéstrame que me amas tanto como dices, tal vez te dé una oportunidad, pero demuéstrame que eres una valiente guerrera.
La chica solo asintió ante tal cosa, y esperó una señal, pues esa esperanza, falsa o no, era una esperanza.
Mientras tanto, Kyoto enfrentaba a los piratas muertos de la tripulación de Crane Bonny, quien esperaba pacientemente alguna apertura, pero no encontraba algún espacio para atacar al chico, pues estaba bien cubierto, de una u otra forma al encontrar una apertura, otro sujeto atacaba y el chic la cerraba, prácticamente era el final de Crane Bonny, pero vio como cada uno de sus tripulantes eran arrojados y decidió absorber sus almas, creando un ser bastante grande, pero aún no lo suficiente para atacar.
Mientras tanto, Ride y Rode estaban buscando a aquellos chicos, pues habían demorado bastante para el gusto de ellos, decidieron ir a ver que les ocurría, pero al ver al gigante demonio Crane, supieron que algo maligno había pasado, vieron a Kida oculta entre los árboles, decidieron seguirla.
-¿Qué ocurre Kida-san?- preguntaba Ride.
-Pues que Kyoto-kun está a punto de enfrentarse a Crane con un poder fuera de este mundo, trató de sellar su alma, pero no pudo, y ahora se sacrificara por salvar mi bosque- dijo con lágrimas en los ojos.
-Ustedes son como el Yin-Yang- dijeron ambos gemelos.
-¿Por qué lo dicen?- preguntó la ojiazul confundida.
-Pues tú expresas lo que sientes, él no, tú eres Agua, él es Fuego, tú eres la luz, y él es la oscuridad, ambos se complementan a la perfección- dijeron los chicos.
Esta respuesta le dio fuerzas de quien sabe donde a Kida, quien al ver a Kyoto levantando sus manos al cielo, creó un campo de fuerza que protegía toda la selva amazónica.
-Eres lista Kida-san- dijo Kyoto mientras peleaba con más piratas.
De pronto, una mano enorme tomó del cuello al chico de las sombras, dejándolo sin aire, Kyoto alzó la vista al ver un cristal esférico en el pecho del nuevo Crane, en su cuerpo se había formado una armadura metálica, que le daba mayor resistencia., sus manos estaban metalizadas y muy pesadas por lo visto, Kyoto dedujo que eso le quitaba algo de velocidad.
-Tal vez no tengas corazón, pero si puedes morir, Atributo Metal: Garra Explosiva- dijo el espíritu de los piratas, quien además, tenía una especie de engranajes.
-Kyoto-kun, sus atributos ahora son Metal y Fantasma, puedes derrotarlo con fuego- dijo la chica con convicción.
-Eres genial Kida-san, no cabe duda que serías una gran líder del equipo- dijo el chico con seriedad- Crane, tus crímenes no tiene perdón, serás juzgado hoy mismo: Atributo Oscuridad: Lanza de las Tinieblas*****.
Unas enormes lanzas perforaron el cuerpo de Crane Bonny, para después Kyoto liberarse de las garras metálicas.
-Ahora acabaré contigo- dijo el chico con una mirada sádica, Kida sabía que eso eran muchos problemas para quien lo viera con esa mirada.
-Ahora Kyoto está sonriendo, eso significa que está a punto de cumplir con la misión- dijo la chica.
-Estoy a Punto de lograrlo- gritó el pelinegro a lo lejos.
-Estamos a punto- corrigió Kida.
Kyoto bajó el cierre de su gabardina para mostrar unos dientes muy filosos y fieros, parecía la sonrisa de un dragón, pero quien veía la realidad de esa misma sonrisa era Kida.
-Solo es una ilusión, hace creer que todos los que ven esos dientes fieros están asustados- dijo la chica.
De pronto, a los 3 segundos de quitar la parte de la gabardina que cubría su boca, el espíritu de los piratas cayó con el rostro completamente pálido.
-Ahora, después de mi ilusión de la muerte, creo que sigue el juicio: Atributo Oscuridad: Tercia de Jueces: Sellado Infernal de 5 Vías.
Nuevamente la estrella de 5 picos se revelaba ante Kyoto, quien volvió a envolver con ese sello al espíritu, enviándolo directo y sin escalas al inframundo.
-Se acabó- dijo la chica.
Pero no se esperaba que Crane volviera a escapar, ahora eran 2 piratas, Kyoto caía en la desesperación, pero Kida vio como cada vez que intentaba sellarlo, este se volvía cada vez más poderoso, y eso ella lo notó.
-Kyoto me necesita, crearé el campo de fuerza- dijo la chica volviendo al domo- ahora, Danza Lluvia- finalizó la chica.
Ella empezaba una coreografía bastante compleja que, en cierto punto, parecía ensayada, de pronto, una tormenta dejó caer un rayo, encima de Kyoto.
-Perdóname Kyoto-kun.
-Eres lista Kida-san, muy lista, de hecho, no te disculpes, eso era lo que necesitaba- dijo el chico cubierto por energía.
-¿De qué hablas?- preguntaron los gemelos.
-Esperen y verán- dijo el chico, para luego decirse a sí mismo- Un poco más, cada vez más cerca de ti, Sara, cada vez más cerca.
-¿Quién es Sara?- dijo Crane Bonny.
-Nadie que te importe, si te lo dijera, sería una pérdida de tiempo.
-Pelea entonces, esto es emocionante.
Otro combate iniciaba, ahora Kyoto estaba cubierto de energía eléctrica, que le daba cierta ventaja contra la armadura de Crane Bonny.
-Atributo Fuego/Eléctrico: Rayo Fusión- dijo el chico cargando toda esa aura que lo cubría- Absorción de energía- Kyoto se cubría nuevamente con el nuevo aura- Técnica de Sacrificio: Ignición final.
Kyoto, ahora cubierto con aura ígneo y eléctrico, golpeaba brutalmente al espíritu, quien no soportaba el poder que el chico emanaba, de hecho, era la primera vez en su vida que veía algo así.
-¿Qué demonios eres muchacho?- preguntó asustado Crane.
-Soy la maldad en contra de la maldad, la Noche buscando que el día triunfe, aquel que busca un balance entre Día y Noche, Luz y Oscuridad, Sabiduría e Ignorancia, Yin y Yang, Kyoto Katekyo, Técnica de combate cuerpo a cuerpo: Kung Fu: Ave Fénix- dijo el muchacho dando un salto.
Estando Kyoto suspendido en el aire, el aura que lo cubría mutaba en un pájaro gigante que seguía cubriéndolo, para caer en picada sobre el pirata, gracias al domo creado por Kida, el bosque no sufrió ningún daño, de la nada, el ave golpeó a Crane desde diversos ángulos, no supo por donde venía cada ataque, solo sabía que entre más golpes, más daño, pero lo que casi lo mata, fue un movimiento bastante extraño.
-Atributo Agua: Tifón- dijo la chica creando un ciclón con el agua del río, para impactar a Crane quien estaba resentido por el calor emanado, ahora la disminución de la temperatura lo dejó paralizado.
-Excelente, ahora yo sigo: Patada Ígnea- dijo el chico mientras giraba para golpear al espíritu.
Crane Bonny estaba perdido, podría jurar que ahora sí no se escapaba de cualquier cosa.
-Veo que el sello es inútil, debo mandarte a recorrer el infierno por tu cuenta, ni sueñes que será algo corto: Técnica Oscura: Invocación del Shinigami: Corte Único- dijo el chico con seriedad.
De pronto una enorme guadaña salía de la espalda del pelinegro, haciendo que Kyoto ni se inmutara pero que Crane resintiera como su alma se partía en 2.
-Ahora las cosas están así, la mitad de tu alma es mía, la otra mitad es del infierno, por lo que ya no puedes escapar- dijo sin emoción el chico.
-Adelante, mátame, pero te diré una cosa: “Directamente del tiempo y espacio, un semi-dios vendrá a darte dolor y sufrimiento, nunca serás feliz, ni siquiera te dejará acompañado, morirás solo, preguntándote que hiciste, y la única respuesta que obtendrás será: estar vivo, y decidirás acabar con tu sufrimiento, mientras ese día llega, esperaré el tiempo necesario para verte decaer en el hueco de la soledad”- dijo el pirata.
-Gracias por tu advertencia, la tomaré en cuenta- dijo con sarcasmo el pelinegro- ahora: Atributo Oscuridad: Tercia de Jueces: Sellado Infernal de 5 Vías
Por fin la técnica funcionó, Crane Bonny fue sellado al más profundo de los infiernos, pero el sufrimiento sería guardado dentro de Kyoto, para potenciar sus técnicas de Atributo Oscuridad, cayó de rodillas frente a los chicos que veían la batalla desde lejos.
-Te perdonamos, Kyoto-san- dijeron con burla los gemelos.
-¿Te sientes bien?- preguntó Kida, quien estaba resentida por el aura usado.
-Preocúpate por ti, estás agotada, no debiste sobre esforzarte, te felicito, eres una valiente guerrera- dijo el chico con su característica seriedad.
-Dime Melodi******, Kyoto-kun, es un placer para mí, luchar a lado de tan valiente guerrero- dijo sonrojada la chica.

Kyoto solo asintió para desmayarse, despertó 30 minutos después, para encontrarse dentro del jet privado, con rumbo desconocido.
*: Alusión a los piratas James Bonny y su esposa Anne Bonny, quienes surcaban los mares en busca de los más preciados tesoros, entre los que destacan sus anillos de matrimonio, según los piratas de la época, quien obtuviera ambos anillos, su suerte sería mejor.
**: Opening 1 de XTARS.
***: El infierno tiene diversas separaciones, además de varios reyes gobernados por uno solo: Satanás, en teoría son 9 infiernos, que si los consideramos dentro de XTARS, solo existen los infiernos Azteca, Griego, Egipcio, Nórdico, Japonés, Musulmán y el inframundo Católico.
****: La tercia de jueces son los dioses de diversas mitologías que vigilaban la entrada del infierno, y decidían quien iba al paraíso, los tres jueces eran Anubis, dios egipcio del inframundo, Azhi Dahaka, Dragón de tres cabezas de origen persa y Tezcatlipoca, Dios Azteca que vigilaba la entrada del Mictlan, o reino de los muertos.
*****: La lanza de las tinieblas eran en realidad 2 lanzas, de los dioses griegos Fobos (Fobia), y Deimos (miedo), ambas muy poderosas y que dejaban en desventaja a los enemigos.
******: De ahora en adelante, se mencionará a Kida Inverna como Melodi Inverna, ya que el personaje principal (Kyoto) tiene la dificultad de recordar nombres que empiecen con la misma letra que el suyo (K) y para evitar confusiones posteriores.

Capítulo 115: Dos semanas para la guerra.

Capítulo 115: Dos semanas para la guerra. -¿Habrá llegado ya el mensajero?- preguntó Kyoto mientras realizaba algunas abdominales. -Esto...