Capítulo 30: El Invencible

Capítulo 30: El Invencible

-¿Harás eso aquí, Kyoto-kun?- preguntó asustada Melodi.

-Claro, es la única alternativa que tenemos para salir de aquí- dijo él mientras dibujaba un pentagrama en el suelo.

Los demás sabían que ella y él estaban algo raros desde la mañana, y que Kyoto no estaba maldiciendo ni jodiendo a nadie, eso sí estaba para ser…

-El fin del mundo- susurró Zentraedi.

-¿Algún comentario inteligente, hermano?- Zentraedi solo negó con la cabeza-Muy bien chicos, abran un círculo por favor- los demás rodearon a Kyoto- Sello de invocación: Materiales de Construcción.

De un pentagrama, salieron varios troncos enormes, una serie de rocas de metal, algunas telas muy largas y algunos víveres.

-Bien chicos y chicas, tenemos víveres para 5 días, así que podremos trabajar con calma, Ride, tú y tu hermano usan el atributo metal, mientras cortas los troncos para crear el casco, la cubierta, los mástiles, paredes y algunas vigas de contención, entre otras cosas, Rode creará una fundidora para las rocas de metal y hacer clavos, cañones, lógicamente yo haré eso con técnicas de atributo fuego.

Una risa burlesca salió de la boca de Zentraedi.

-Idiota, ¿cuál es la maldita risa?- preguntó Kyoto enfadado.

-¿Me preguntas cuál?, es lógico, tu solo manipulas el atributo oscuridad porque a falta de emociones positivas no puedes hacer gran cosa con el…- su comentario fue interrumpido por una fuerte llamarada- ¿yo que haré hermano?

-Tú iras ensamblando las partes del barco y, con tu fuerza, lo cargarás al océano, lo anclaras y listo.

-¿En serio voy a cargar esa cosa?- preguntó Zentraedi asustado.

-De hecho gracias a tu chistecito sí, felicidades hermano, te sacaste la lotería- dijo Kyoto burlesco- ahora bien, chicas, ustedes harán las velas y el atado de cuerdas para impulsar con viento el barco, aprovecharemos las corrientes que marquen nuestra ruta, ahí entras tú Windy, puedes percibir las rutas y la temperatura de las corrientes de aire por lo que puedes guiarnos sin peligros como tormentas, en caso que estemos en problemas durante la navegación por extremas temperaturas- vaciló un momento- Inverna regulará las temperaturas de las corrientes de aire y- sacó otro mapa- en las corrientes donde el absorbe-aura desaparece, lo impulsará con Agua Control, y Mindy… ¿sabes cocinar?

-E…espera Kyoto, ¿qué rayos te propones…?

-Está dicho, serás la cocinera oficial de la tripulación, si quieres ayuda no dudes en pedirla- dijo burlesco.

Sí, estaba algo raro desde esa noche, pero Melodi no iba a decir nada, de eso estaba ella al cien de segura.

-Y chispita- apuntó a Natsuki- en caso de tormentas, absorberás los rayos, ¿creer poder con eso?

-Si puedo lanzarlos al idiota de mi novio cuenta con ello- dijo ella con dureza.

-Muy bien, ahora, a trabajar.

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En la mansión Schiffer.

-Gracias Ashura- dijo un moreno con tez nívea- gracias por esta nueva oportunidad.

-De nada Katekyo, ya lo dije, lo que sea por mi mejor amigo.

-Gracias, Sofía, no sé cómo pagarte este favor hermana- comentó Erika.

-Déjalo así, ya sabes, si ves a mi hijo dale mis saludos- dijo Sofía.

-Bueno, claro, ten por seguro que recibirá tus saludos.

-Oye Ashura- dijo Kazuo de la nada- ¿te llamas Darío o Ashura?

-ASHURA, el inicio del proyecto me obligó a cambiar de nombre código, hasta mi hijo me llama Darío, ya sabes, D-4R10, y vaya que fue pesado, pero sigo siendo Ashura.

-Gracias al cielo- dijo Erika tomando la mano de su esposo.

-Muy bien Erika, en estos momentos hay que llegar a Cydonia, es el lugar que ellos tienen marcado de destino- dijo Kazuo haciendo unos sellos.

-Claro que sí, hay muchas cosas que él no sabe, y hay que aclararlas a como dé lugar- dijo ella imbuyendo aura a su esposo.

-ATRIBUTO YIN/METAL- Gritaron ambos mientras un portal surgía- TELETRANSPORTACIÓN.

Y se desvanecieron.

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Al pasar 8 horas de trabajo arduo, por fin se levantaba, imponente, poderoso, llamativo.

-INVENCIBLE- decía Kyoto mientras marcaba con tinta un costado del barco para ponerle el nombre.

-Sí lo hiciste Kyoto-kun- dijo Melodi con lágrimas de alegría.

-¿Ya sabías de eso?- preguntaron todos menos Kyoto.

-Pues en la exposición de arquitectura de la Secundaria, él presentó un proyecto algo antiguo, en el que usando palitos de paleta, telas, trozos de lamina de hierro y fuego, hizo un barco que se llamaba así, el Invencible.

-Pues era un maldito genio, supongo que ganó el concurso de esa exposición- dijo Ride con cansancio.

-De hecho, fue descalificado- dijo Zentraedi con pesar.

-Maldito mocoso- dijo Natsuki golpeando el suelo.

-¿Qué pasó?- preguntó Windy.

-El barco funcionaba bien, era perfecto, podía navegar con corrientes de aire, lanzar los cañones, si se le hacía una modificación, podría ser controlado por señal de antena, pero…- dijo Zentraedi.

-El hermanito del ganador en esa exposición fue con Kyoto para tomarse una foto con el barco, pero su plan era otro, con su brazo tiró el barco, destruyéndolo en el acto, justo cinco minutos antes de que…- alcanzó a decir Melodi.

-Antes de que iniciara el concurso- dijo Kyoto como si nada.

-¿Y no lo volviste a hacer?- preguntó Rode.

-¿En cinco minutos?- dijo Kyoto viendo el barco que habían hecho- ahora sí puedo hacerlo, pero antes no, pero ya es pasado, hice mi modelo tamaño real y ese mismo día obtuve mi venganza.

-No me digas…

-Sí, ese día me reí de lo lindo al presentar mi proyecto- dijo Kyoto antes de reírse.

-¿Qué hiciste?- preguntaron los gemelos y las mellizas impacientemente.

-Pues que mi proyecto fue de cuánto tiempo aguanta un resorte de ropa interior con una masa de 23 kilogramos suspendido a una altura de dos metros con una gravedad de 9.8 de fuerza, mientras sus padres y sus hermanos me decían que lo bajara- dijo Kyoto mientras reía- y por eso me descalificaron.

-Te descalificaron por faltas a la moral- dijo Natsuki.

-¿Qué?, mierda, yo creí que me habían descalificado porque mi proyecto era para la feria de ciencias, no de arquitectura.

-¿No sientes ni un ápice de arrepentimiento?- dijo Mindy.

-Ni el más mínimo, si me preguntas el por qué, fue porque él se lo buscó- se restiró mientras daba un enorme bostezo- oigan chicos, alguien quiere cenar rico antes de mañana, recuerden que Mindy va a cocinar.

-YOOOOOO- gritaron todos menos Mindy.

-Eres cruel- dijo la peli morada.

-Lo sé- y se fue para reír.

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En un laboratorio ingresaba el escuadrón de desechos, para ver solo a un ente con 8 tubos de suspensión animada vacíos.

-Las manos arriba donde las pueda ver- dijo el oficial con temor.

-Oh, claro- alzó sus manos inocentemente.

-¿Dónde diablos están los cuerpos que tenemos que recoger- dijo otro mientras apuntaba con el arma.

-A mi derecha están- dijo el ente apuntando a una pila de cuerpos.

El oficial los contó una y otra vez.

-Solo son siete, ¿Dónde está el otro?.

-Aquí estoy- dijo calmadamente una voz.

-Kyoto Katekyo, serás eliminado del proyecto, como otro rotundo…

-Atributo Fuego: Calcinación.

El chico arrojó una bengala que convirtió en cenizas a los oficiales del escuadrón de desechos.

-Gracias Kyoga- dijo Destiny mientras creaba un portal.

-Es lo menos que podía hacer, Padre- luego vio a los cuerpos- oigan idiotas, ya levántense- dijo con autoridad.

-Mierda, estar ahí tirado me dejó de veras entumido- dijo un albino.

-Cállate Rush, que al menos tú estabas cómodo- se quejó un par de chicos.

-Bla Bla, cállense tercia de Idiotas- dijo una voz femenina- Elesa, Maya, May, a levantarse.

-Ya vamos- dijeron las mencionadas mientras bostezaban.

-Bueno, desafortunadamente- dijo Destiny mientras los clones se movían- esa idiota y su amor platónico sobrevivieron junto al grupo de idiotas.

-Pero padre- dijo Lírica- podemos destruir todo como si fuéramos ellos.

-No, ese no es mi plan, quiero acabar con ese grupillo de mierda, con los ocho, y debemos seguirlos a donde sea que hayan ido…

-The Fantasy- dijo Kyoga- allá se fueron.

-Mierda, otra vez ese lugar, tantos problemas me causó, ahí fue donde mi hija fue amancillada por Katekyo- dijo con odio el ente.

-Pero ya se deshizo de ellos, ahora solo queda el fruto de ese acto- dijo Ryota.

-Sí, falta Kyoto, ese maldito mocoso deseará no haber nacido- Comenzó a acumular aura- Atributo Yin/Psíquico: Portal a The Fantasy.

El portal comenzó a mostrarse ante el grupo de Nightmare, que no dudaron en entrar seguidos por Destiny.

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En la fogata que estaba al centro de las casas que Kyoto había invocado, Natsuki estaba recargada a los hombros del albino mientras dormía, Windy y Mindy estaban abrazadas mientras que Ride y Rode hicieron un poco de leña con la madera restante.

-Kyoto- Rompió el silencio Ride- ¿Qué diablos eran esos troncos?, creí que tomaría más tiempo cortarlos pero fue demasiado sencillo.

-Son Troncos de Caoba Bélica, es una madera algo bizarra, resiste los impactos de cañones, armas de fuego, lanzallamas entre otras armas, pero si la ocupas para construir, es muy fiable de cortar y manejar- dijo Kyoto echando otro leño- así como esa fogata, la usamos para darnos calor, cocinar, y dar luz, por lo que se prendió fácilmente, pero te juro que va a tardar en arder.

-Y el metal, ¿qué hay con él?- preguntó Rode.

-Es Metal de Dragón Negro, muy resistente según Kazuo Sensei, antes de que entráramos aquí, me dijo que él ya había estado aquí, y que tuvo que conseguir esos materiales para crear otro barco- dijo Kyoto mientras veía a Melodi.

-Oye, has estado algo raro este día, echando relajo, y aunque es bueno, no estamos seguros de que es lo que pasa- dijo Zentraedi.

-Chicos, la verdad es que… me gusta una chica del equipo- dijo suspirando.

-Bah, a otro perro con ese hueso- dijo Ride- según recuerdo, siempre estabas Sara, Sara, maldita sea, sales con que te gusta alguien del equipo.

-Pero es la verdad- dijo Kyoto.

-Y si es la verdad, dinos quien es- dijo Rode cansado.

-No es tan fácil, bueno, tengo que comentarles algo en secreto y….

Mindy y Windy se metieron a su respectiva casa mientras Melodi se levantaba y se dirigía a la suya, Kyoto apuntó a la pequeña que Zentraedi tenía en su hombro.

-Por favor Kyoto, está dormida- dijo él con súplica.

-Eso no quita que tenga orejas, llévala a su casa, a su cama y duérmela, quiero que esto se quede entre nosotros- dijo Kyoto cansado.

-Ok- dijo mientras levantaba con calma a su novia.

En 5 minutos, los cuatro chicos estaban reunidos nuevamente.

-Bien, ahora sí, dinos que te pasa- pidieron los tres.

-Bueno, la verdad es que, tuve un sueño con Inverna.

-¿Inverna Melodi o Inverna Meredi?- preguntó Ride.

-Melodi- dijo Kyoto.

-Pues, ¿qué pasó?

-Fue una revelación, de que ya la conocía de antes, y la defendí, y no sé, pero en mi etapa de secundaria, ella siempre me animaba, pero nunca le presté atención, hasta ahora- dijo Kyoto con un ligero rubor en sus mejillas.

-Ah, Kyoto-chan está creciendo.

-Zentraedi, síguele de chistosito y juro por mi alma que de dejaré sin descendencia.

-Ok- dijo Zentraedi asustado.

-Bueno, no sé qué…

-Dile lo que sientes, eso deberías hacer- dijo Rode

-Con un carajo, quiero que esto se quede entre nosotros, Melodi no es un juego y decirlo ahora significaría que en realidad solo saldré con ella porque…

-.Porque se parece a Sara, cierto- dijo Zentraedi- bueno, problemas del corazón son un misterio, hasta para tus ojos Kyoto, un Katekyo no puede ver más allá de su nariz porque todo es científico, ¿pero como explican el amor?, solo los Katekyo que lo han vivido lo saben.

-Cierto Zentraedi, y pues bien, quiero protegerla nada más- dijo Kyoto- solo quienes lo han vivido, y eso, puede formar parte de lo que perdí, de mi persona.

-Cierto, puede que no seas el cubito de hielo que finges ser, bueno, que descanses, mañana será un día largo, Lunes, buenas noches- se despidieron los chicos.

Capítulo 29: Amanecer en un mundo irreal.

Capítulo 29: Amanecer en un mundo irreal.

Al abrir nuevamente sus ojos, después de aquella revelación con forma de sueño que tuvo, se dio cuenta de lo cruel que había sido con la mujer que amó en un principio, y que ahora tenía a su lado, amándolo como ella sabía.

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Ella seguía impactada de aquella madrugada, en la que el joven Katekyo la había defendido de un enorme peligro, y se había olvidado de ello, o tal vez este recuerdo divagaba en su inconsciente.

Bajó de su cama para tomar una ducha, al entrar al cuarto de baño, comenzó a desvestirse lentamente, mientras los vapores provenientes de la ducha inundaban el cuarto en que ella se desnudaba, vio su cuerpo al espejo y se dio cuenta, ya no era aquel patito feo que todos molestaban sino el hermoso cisne que ahora era.

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Levantó lentamente su torso, debido al dolor de los nervios que le había ocasionado la técnica de Mindy y Windy, sin embargo, la culpa de saber que había perdido los estribos una vez más le torturaba, pensaba en ello mientras velozmente se dejó caer en la cama, y su cabeza golpeó bruscamente la pared, haciendo que el moreno soltara un alarido que inundó su casa.

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-Ya despertó- dijo Natsuki con calma mientras tomaba una taza de té.

-Paguen gemelas- dijeron Ride y Rode con satisfacción mientras estiraban sus manos.

-¿Ahora qué carajos apostaron?- preguntó Zentraedi.

-Verás mi encantador Zentraedi- dijo Ride provocando un sonrojo en el albino- las mellizas apostaron sobre la causa del dolor matutino de Kyoto, así que no pudimos resistirnos- finalizó el chico de cabello plateado.

-Ellas- dijo Rode- apostaron a que la Técnica de Mindy le había destrozado los nervios volviéndolo muy sensible a sus movimientos, pero fue cosa que NO pasó.

-Y ellos- continuaron las mellizas- apostaron acerca de que se golpearía la cabeza con la pared o se caería de la cama, cosa que SÍ pasó- dijeron las mellizas mientras entregaban los fajos de billetes.

-Adoro el aroma del dinero fresco por la mañana- dijo Ride pasando los billetes por su nariz.

-Es cierto hermano- dijo Rode- Huele a- volvió a aspirar los billetes- VICTORIA.

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 Luego de su golpe matutino, Kyoto decidió darse una ducha, para despejar su cabeza un momento, se levantó y caminó hacia el cuarto de baño, cuando entró, logró ver que todo estaba totalmente cubierto de vapores, cosa que le hicieron pensar que su máquina de agua caliente que él había diseñado era un total éxito.

Comenzó a desvestirse sin ningún miramiento y se metió bajo la regadera. Ya adentro trató, a ciegas, de encontrar la perilla que regulaba el agua fría, pues se quemó el brazo al entrar, pero en vez de la perilla, tomó algo más blando.

-¿Qué rayos?- dijo mientras apretaba nuevamente.

Un gemido le hizo abrir los ojos desmesuradamente mientras los colores le subían al rostro.

-¿I… Inver… Inverna?, ¿O… Otra v… vez?- el azabache estaba totalmente rojo y avergonzado.

-K… Kyoto-kun- ella se veía molesta- ¿S… sabes t… tocar la p… puerta antes d… de en… entrar?

-E… Espera… Yo n… yo no quería…

-Atributo Agua: ESCALDAR

Y una corriente de agua hirviendo iba con dirección al rostro del moreno mientras que él trataba de cubrirse.

-MI BRAZO- volvió a gritar Kyoto.

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Mientras tanto afuera de la casa de oricalco de Kyoto.

-Paguen gemelas- volvieron a decir Ride y Rode.

-Nunca gano nada- dijo Mindy con tristeza mientras entregaba sus billetes.

-Yo tampoco- dijo Windy de la misma forma.

-¿Ahora que fue?- preguntaron Zentraedi y Nocturna.

-Pues- comenzó el castaño- ¿recuerdas que metimos a Kyoto y a Melodi a la misma casa?

-Sí- dijo el albino.

-Y que Melodi nunca vive sin sus baños matutinos- continuó Mindy.

-Aja- contestó la pequeña rubia.

-Pues a Ride- dijo Windy- se le ocurrió la genial idea de meter a ambos en la misma casa porque Kyoto tampoco vive sin sus baños matinales, así que nosotras mujeres apostamos a que Kyoto perdía el control al verla y se abalanzaría sobre ella dándole mucho amor- continuó la peliverde con picardía.

-¿Y ustedes caballeros?- preguntó Natsuki con sarcasmo.

-Mientras que nosotros hombres- dijo Rode- apostamos a que Kyoto se controlaría, y que la tocaría por accidente, provocando algo de furia en ella, de esa forma ella le agrediría física o áuricamente, que fue lo que sí paso.

-Idiotas- mascullaron Zentraedi y Natsuki.

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Al salir de la casa, sonrojados y con algo de enfado, aunque Melodi salió algo excitada porque al entrar Kyoto activó su ojo cascada viendo algo que no debió ver, miraron a los artífices de esa jugarreta.

-¿De quién fue la idea?- preguntó Kyoto.

-M… mía- contestó Ride asustado.

-¿Algo que alegar en tu defensa?- preguntó el moreno mientras cargaba aura oscura en su mano.

-Sí, Melodi, Zentraedi agarró tu juego de ropa de dormir que guardaste celosamente en tu ropero para el plan número 587 de cómo conquistar a Kyoto y se lo regaló a Natsuki porque olvidó su regalo de cumpleaños de ayer- dijo astutamente Ride.

-¿Qué?- preguntaron ambas mujeres con una vena en la sien y mirando a Zentraedi con intenciones asesinas.

-“solo quédate callado, no alegues y no comentes ninguna…”- su voz se alzó rápido contra su mente- Además, tu ropa no le queda a la loli de mi novia- no evitó decir el albino.

Todos solo suspiraron mientras veían a la rubia enfadarse.

-Zentraedi- dijo Natsuki con furia- ¿hace cuanto tiempo no te torturo?.

-Más tiempo de lo que puedo recordar- dijo Zentraedi.

-Te ayudo amiguita- dijo Melodi.

-Gracias- Natsuki se puso a lado de Melodi.

-ATRIBUTO ELÉCTRICO/AGUA: CORRIENTE- gritaron ambas mientras preparaban sus técnicas-

Un chorro de agua mojó a Zentraedi que miraba escéptico la escena, hasta que recordó sus clases de física.

-Oh mierd…

Una corriente eléctrica le hizo sacudirse mientras pasaba por su cuerpo, mientras los demás esperaban el desenlace con una gota de sudor recorriendo sus sienes.

-Deberíamos traer unas rosetas de maíz, ¿no crees Rode?- dijo Ride viendo las luces que emitía Zentraedi con su cuerpo.

-Cierto hermano- contestó el castaño entretenido- y dime, ¿Cuántas veces has hecho enojar a mamá?

-Más de las que puedo recordar- dijo el peliplata- ¿y tú?

-Oh bueno, ¿recuerdas cuando me comí sus chocolates envinados?- Ride asintió- pues, desde ese día no me gusta el chocolate- dijo Rode con pose sabia.

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Al transcurso de una hora, por fin todos estaban listos para planear una vía de escape de The Fantasy.

-¿Algún plan?- preguntó Kyoto.

Silencio absoluto.

-Entonces, ¿Alguna propuesta?

Más silencio.

-¿Algún comentario?

-Yo- levantó su mano Zentraedi.

-Sí, chispita- se burló Kyoto.

-Ya deja de joder, bueno, solo tengo un comentario, ¿sabes cómo salir de aquí?

-Por eso pido sugerencias, si yo en menos de una hora planeé 25 vías de escape, al menos ustedes debieron planear unas 50- dijo Kyoto con calma.

Silencio absoluto.

-Bueno, me iré al campo a descansar y mientras planean tomaré un baño.

Todos se vieron con temor y duda, nadie había planeado nada, y se dedicaron a apostar con las reacciones de Kyoto y Melodi ante situaciones incómodas, así que, en teoría y practicamente solo estuvieron…

-… jugando, solo eso estaban haciendo, jugar con los sentimientos de Inverna y con…- asimiló lo que iba a decir- y conmigo como si fuéramos unos trozos de carne andante.

-Lo sentimos- dijeron los chicos- pero es que hay que admitirlo, no hay solución, no se puede abrir un portal dimensional de la nada.

-Lo sé, por eso fue que creé tan fácilmente 25 alternativas de escape, de las cuales, solo 3 evitarán un sacrificio, pero tienen efectividad de 100, y las otras 3, una tiene probabilidad de cien en cien y, probablemente podríamos morir en el intento, las otras 2 son más seguras, pero su probabilidad de acierto es de ochenta sobre cien.

-Explícanos- dijeron los chicos.

-Bueno, las veintidós alternativas son crear un vórtice, según Mindy y Windy, al ser este un universo, se puede abrir un portal a otro universo, es decir, al nuestro, pero podría morir en el proceso, ya sea antes del viaje, durante o al final…- alcanzó a decir Kyoto.

-Cierto, hay que llegar todos bien- interrumpió Ride.

-La veintitrés consiste en que Mindy y Windy creen un vórtice, el cual funja como puente a nuestro mundo, pero hay un problema…

-Nuestro mundo puede cambiar pues es un viaje que va a velocidades luz, por lo que podríamos llegar al futuro, al pasado o equivocarnos en la conexión destino- dijo Mindy ante el asentimiento de Kyoto.

-Gracias Mindy, bueno, la veinticuatro es volar hacia el cielo buscando un portal, pero es muy raro de encontrar, pues de todo el vasto cielo, solo ocupa un tamaño de…- buscó algo a sus alrededores hasta que- oh sí, del tamaño de esta piedra.

Era una piedra del tamaño de un tonel y, de forma simbólica, buscar aquel mini portal era buscar una aguja en el pajar, así que…

-Y finalmente la veinticinco que fue la que más me convenció- sacó los mapas, unos planos de construcción entre otras cosas- Este mundo se divide en 6 países grandes, casi continentes, y son Hefestos, la tierra de los herreros, Mythland, la tierra de los dioses y seres mitológicos, Silkland, país de las más grandes y finas telas y los mejores sastres, Citizen Kingdom, que es un país monárquico militarizado, y el Reino de Cydonia- dijo Kyoto mostrando el mapa.

Los chicos se acercaron para ver a los 5 países nombrados juntos en un solo terreno, dividido por ríos, lagos, mares y relieve, climas entre otras cosas, pero les sorprendió la Rosa de los Vientos y una isla gigante alejada del Super continente.

-Kyoto, ¿Qué es ese lugar?- preguntó Ride.

-Ese es el sexto país, anárquico realmente, sin civilización alguna, hasta que llegamos- volteó a ver a los cielos- Vacuum, el país Vacío- dijo Kyoto.

-Ok- dijo Zentraedi- según lo que entiendo, iremos al “Gran Continente”, que es el de los 5 países unidos, para eso, hay que cruzar el océano, y lo peor, ¿A dónde carajo nos orientamos?

-Me alegra que preguntes mi encantador Zentraedi- el albino se sonrojó- bueno, algo que pude deducir fue que el sol, contrario a nuestro mundo, sale por el Norte y se desvanece al Sur, mientras que la luna sale por el Este y se mete al Oeste- dijo Kyoto sacando su brújula- todo campo magnético lleva dos polaridades, N y S, y en este momento, los dragones vuelan hacia el norte en busca de calor pues es verano allá- dijo Kyoto mientras señalaba a los imponentes dragones.

-Bueno, basándonos en tu teoría, el “Gran Continente” está en el este- dijo Ride, si vemos claramente, al este está la playa, de hecho estamos muy cerca de la costa, así que solo explícanos una cosa más, genio, ¿cómo cojones vamos a salir de aquí?

-Ride, Ride, Ride- dijo Kyoto antes de suspirar- si hay algo que aprendí, es que no se puede usar aura para cruzar el “Océano Gigante”, así que navegaremos- dijo Kyoto sonriendo.

Los demás solo retrocedieron, sabían que Kyoto había armado un plan, en menos de 3 días, sin desesperarse, y a pesar de sentir un ligero temor por lo que pasaría, se alegraban, pues Kyoto comenzaba a demostrar interés por los demás, por fin saldrían de ahí.

-CONSTRUIREMOS “EL INVENCIBLE”- Gritó Kyoto con orgullo.

-¿QUÉ?- preguntaron todos los demás con sorpresa.

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-Kazuo- dijo Erika entrando al sótano de los Schiffer- ya quiero mi cuerpo.

-Ashura, por favor dinos que sí hiciste lo que…

-Claro que sí- dijo un hombre de cabello blanco, ojos rojos y tez nívea- la investigación de la nanotecnología avanzó tanto que ahora, ustedes tienen total control sobre sus cuerpos- dijo con orgullo revelando dos tubos de suspensión animada.

-¿Mi cuerpo?- preguntó Erika.

-Así es hermana- dijo una pelirroja bajando de las escaleras- logramos reconstruir tus células con nanobots, pero solo fueron daños mínimos, ya sabes, perdiste una mano y parte de tus extremidades inferiores, pero todo lo demás quedó intacto y mantenido hasta hoy- dijo con orgullo.

-Gracias chicos, de verdad, les debemos una - dijo Kazuo mientras creaba un par de sellos.

-De nada, Katekyo, todo por mi mejor amigo- contestó Ashura.

-Muy bien Erika, ¿Lista?

-Lista Kazuo- dijo ella con decisión.

-ATRIBUTO YIN-YANG: RESURRECCIÓN PURA.

Y las almas comenzaron a entrar a los cuerpos inertes, que gradualmente comenzaron a recuperar tono, suavidad, y fuerza, el matrimonio Katekyo-Aramis iba a regresar.

-Por ti hijo- dijeron ambos mientras el último aliento de alma entraba en sus cuerpos

Capítulo 28: Revelaciones.

Capítulo 28: Revelaciones.

Un trío de niños molestaba a una chica de cabello negro, eran el grupillo de bravucones de la Escuela Básica y Media Básica Privada “San Bruto”, la escuela donde admitían niños expulsados de otras instituciones, y a la cual él había tenido la mala suerte de entrar por una razón, era una especia de correccional para delincuentes menores, y desde que se supo que él era el único involucrado en el asesinato del anterior director, Victor Lence, estaba obligado a ir mientras duraba su estadía en el orfanato.

-Hey, es la niña del Aro, corran, no vaya a chuparnos el alma- dijo uno de ellos.

-Sí, maldita niña, regresa a tu pozo antes que nosotros te llevemos de vuela y te tiremos.

-El pozo está cerca, a menos que quieras que te llevemos- dijo el último de ellos.

La pequeña solo atinó a sollozar, incapaz de hacer algo contra ellos, sin saber que…

-¿Con que les gusta molestar a una mujer?- preguntó un chico azabache- ¿Me pregunto qué clase de seres serían?, porque humanos es mucho para ustedes, tercia de idiotas.

-¿Eh?, ¿quién te crees que eres tú para hablarnos así?- preguntó el líder de aquella pandilla.

-Mi nombre no te lo diré, pues es algo que ni yo estoy seguro que sea mío, solo te diré que eres peor que la mierda.

A sus 10 años, tenía una visión muy cruda de la realidad, y muy clara acerca de la cabalidad, inocente y cruel a la vez.

-Ya te pregunté una vez, ¿Quién te crees que eres para hablarnos así?

-Sí, rómpele la ca…

El chico que habló solo sintió su quijada partirse con el tremendo trancazo que el niño asestó contra él. Quedó tirado, derramando sangre por la boca, mientras el azabache lo veía con superioridad.

-Me pregunto, ¿si a ti te pagan por ser el perrito faldero de este idiota o lo haces por amor al arte?- dijo el niño mientras caminaba hacia él.

Y el estar lo suficientemente cerca de su víctima, comenzó a asestarle patadas a diestra y siniestra, mientras el pobre chico escupía más sangre.

-Eres inútil- dijo mientras reía a cada patada que asestaba- ¿Dónde están tus amigos imbécil?, ¿Dónde está el que trataba peor que basura y tú lo seguías a todos lados como el lamebotas que eres?, contéstame Ray, dime algo.

Al levantarlo notó la realidad.

-Oh cierto, olvidé que rompí tu maldita quijada- dijo cansinamente mientras lo azotaba al suelo firme.

-Oye, detente- fue ignorado- párale- otra vez fue ignorado- detente imbécil.

-Uno menos- dijo el azabache al dejar de notar movimiento en su víctima- ¿Quién sigue?

-Fran, acábalo- dijo el líder de la pandilla a su subordinado.

-Pe... Pero- el chico dudó de la orden.

-Solo hazlo idiota- dijo el pequeño moreno mientras acomodaba su pierna- si puedes.

Fran se acercó para agarrar al niño que detenía su travesura, pero no sabía que…

-Aquí estoy, tonto- dijo el pequeño mientras asestaba un golpe en la cabeza, pero de ligera potencia.

-Eso no me detendrá, soy el campeón de lucha libre de San Bruto.

-¿Qué?, ¿Qué eres el idiota más grande de San Bruto?- dijo burlesco el pequeño.

-Ahora sí me calaste el alma- corrió hacia el niño para atraparlo, tomándolo de los brazos por la espalda- Te atrapé enano.

Lo tomó del cuello y lo azotó en el suelo firme ante la sonrisa de satisfacción de su líder.

-Mis respetos Fran- dijo el adolescente.

-Gracias, Dan, sabía que me felicitarías por eso.

-Cierto Fran, mis respetos- dijo el chico levantando la vista, mientras lentamente se ponía de pie.

-¿Pero cómo carajos…?

Fue lo único que atinó a decir Fran, puesto que fue tomado de frente por el cuello, y lo levanto, ¡¡¡ANTE LA MIRADA ATÓNITA DEL PÚBLICO QUE PRECENSIABA AQUELLA PELEA!!!

-Otro lamebotas, ya sé que haré contigo.

Y comenzó a golpear la caja torácica del chico, justo en el lado izquierdo, para tratar de romper uno que otro hueso.

-¿Quieres más?

El chico no respondió, seguía escupiendo sangre a cada golpe que recibía, su cuerpo, mucho más grande que el del moreno, se derrumbaba de dolor inmenso.

-Dime si quieres más- dijo el pequeño azabache.

Siguió callado, pues al intentar articular palabras, algo malo pasaría antes de decir cualquier cosa.

Pero lo peor pasó, cuando su amigo vio que algunos huesos perforaban la piel de su amigo, supo que habían cometido un error fatal al meterse con alguien que no debían.

-Solo me quedas tú, pequeño idiota, te daré cinco segundos para que corras.

-¿Pero de qué?

-¿…hablo?, me encanta que mis presas corran antes de atraparles, debo suponer que eres el líder de este grupillo de mierda que atemorizaba a los más chicos, idiota, ahora solo tienes 2 segundos para huir como el cobarde miedica que eres.

El chico no lo pensó más y corrió despavorido ante la silueta del pequeño azabache, quien solo sonrió con satisfacción.

-Lamento llegar tarde, ¿te han herido o algo?

-N…no, t…todo es…esta bi…bien

-Me alegro, de verdad me alegro, pero, ¿qué haces en esta escuela para criminales?, se supone que los bajos mundos no chocan con los reinos de princesas- dijo burlesco el niño.

-S…solo ve…venía de… visita- dijo con timidez la niña.

-Ok, bueno, al menos dime el nombre de la chica a la que acabo de salvar- dijo finalmente antes de colocarse en posición de combate.

-M…Melo…Melodi, Me…Melodi Ryo…Ryone- dijo la chiquilla con timidez.

-Bueno, como dije antes, mi nombre no importa, pero, por ser tú, me llamo…

Antes de que dijera su nombre, un camión sonó su silbato, provocando que la chica escuchara el nombre de su salvador.

-Y no me gustaría volver a decirlo- dijo el pequeño antes de irse del lugar.

Dejándola con un hueco en su existencia, la duda y el momento en el que él la salvó, se convirtió en su admiración.

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Corrió con mucho miedo, sabiendo que si lo atrapaba, iba a ser su fin.

-I am following you- susurró Kyoto mientras corría tras el chico.

-Déjame en paz- gritó el pequeño bravucón con rabia y terror en su mirada.

-Sigue corriendo, que si te atrapo ahora no me divertiré lo suficiente- contestó el azabache mientras saltaba de edificio en edificio.

-Maldito enano, ¿acaso te divierte el sufrimiento ajeno?- preguntó el bravucón mientras seguía la marcha.

-No, solo quiero divertirme un rato, así como tú hiciste con Ryone- dijo el pequeño mientras saltaba sobre él- Y ahora vas a morir.

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Abrió sus ojos negros, aún de madrugada, mientras aquella revelación que le daba su cabeza aún rondaba brutalmente, sabía que no solo conocía a su aterradora acosadora en secundaria, sino mucho antes, y que le había protegido de un mal terrible.

Salió de su cama y fue al lugar donde unos troncos rodeaban una fogata extinta, usó su puño brasas y sacó su celular, puso sus audífonos en alto volumen y comenzó a calentarse desde las manos.

-No lo entiendo- se dijo mientras veía a tres dragones volar en el cielo- realmente no logro entender esto, ¿Quién soy?, ¿A dónde pertenezco?, ¿cuál es mi misión en la vida?

La lista de reproducción de música de Kyoto tenía Somewhere I Belong de su banda favorita Linkin Park, precisamente mientras se formulaba a esa pregunta sonaba la tonada.

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Sus orbes azules se abrieron de par en par mientras hacían remembranza de aquel sueño, en el que corría un gran peligro y de repente fue salvada por un niño muy misterioso, el cual se fue no sin antes decirle su nombre, que no logró escuchar.

Salió de su cama para tomar algo de aire fresco, a puntillas salió de su habitación y se vistió mientras salía, sacó su celular y vio que eran las dos en la madrugada, de repente, reconoció una silueta frente a una fogata.

-K…Kyoto-kun- dijo ella sorprendida.

-Ah, Melodi, ¿estás despierta?

-Claro, es solo que…- su cerebro procesó la información recibida- espera… ¿Melodi?

-Claro, ese es tu nombre, por cierto, se supone que las princesas duermen sus ocho horas obligatorias.

-¿P…Prince…Princesa?

-Claro, además, no debes rodearte de plebeyos como nosotros- dijo Kyoto mientras sacaba un cigarrillo.

-¿F…Fum…Fumas?

-Claro, a ella le gustaba, y mucho.

Ella solo se tomó el pecho como muestra del dolor que eso le provocaba.

-Me di cuenta que hay cosas que en este mundo se esfuman, y otras que como el humo, se desvanecen en el aire, pero siguen ahí, y respiramos ese mismo aire, lleno de humos del recuerdo, de lo que pudo ser, pero no lo sabemos, no elegimos los recuerdos que queremos que lleguen a nuestras mentes, y divagan, en algo llamado inconsciente- dijo el chico mientras consumía su cigarro.

-¿En…entonces tu tam… también lo so…soñaste?- preguntó ella.

-Sí, fue algo raro, pero, tal vez, sea momento de madurar y dejar todo lo que he vivido en el pasado.

A ella le dieron ganas de llorar, él quería olvidar todo, todo su pasado, para buscar su identidad, porque de algo estaban seguros ambos, él fingía, fingía fortaleza, cuando realmente…

-Estoy muriendo Melodi, el saber que este no soy yo me carcome el alma como un gusano bajo mi piel, pero, sé que tengo amigos, que los tengo a ustedes, y que nunca me dejaran morir solo- dijo él mientras sus alas traían más leña.

-N… no t…te pre…preocupes…. Siem…siempre con…contaras c…con nos…nosotros- dijo ella entre tartamudeos.

El rió suavemente, mientras se levantaba hacia ella, haciendo que su mirada se topara con la de él, tomó su mentón y elevó la mirada de la chica.

-Entre más lo haces, más Hinata te pareces, pero te diré algo, sé algo que tú no sabes, esa parte tímida de ti es lo que te hace súper bonita, y me encanta.

Y la besó, un suave beso en los labios que para ella supo a gloria, así que cerró los ojos y correspondió al mismo beso que él le proporcionaba, mientras sus caderas se acercaban más hacia él.

Pero abrió los ojos, para verlo, para captar su mirada.

Notó algo raro, la luz en su mirada que había antes de la muerte de Sara había desaparecido, dejando unos ojos opacos y faltos de vida.

-K…Kyoto-kun.

-Ya basta Melodi, deja de mirarme así, es embarazoso.

Inconsciente, totalmente en blanco es como estaba Kyoto en ese momento, como si alguien hubiese presionado el botón de reinicio en la mente del joven Katekyo.

-Sin miedo no tendré más que hacer que protegerlos- y un par de guadañas salieron de la espalda del moreno- sobre todo a ti, pequeña hermosa- y la besó nuevamente.

¿QUÉ DEMONIOS HABÍA PASADO CON KYOTO?