Capítulo 20: Meredi…

Capítulo 20: Meredi…

Pasada la junta, Sara estaba aún en la oficina del director general de Xtars esperando algo.

-Oh, debo suponer que buscas tener un nombre código, ¿cierto?

-M-3R3D1, ya lo tengo, así como la otra Inverna, M-3L0D1, ¿o me equivoco, señor Oda?

-¿Cómo rayos es que sabes eso?, se suponía que nada de esto debería saberlo otro proyecto, nadie externo debe saber nada- el castaño se estaba poniendo pálido.

-Verá, hay algo que usted bien sabe, y voy a sacarle la verdad, ¿recuerda la generación de 1945?, ya sabe, la Segunda Guerra Mundial.

-¿Que si la recuerdo?, Claro, peleé en esa guerra a favor de mi patria y…

-No entendió mi pregunta, ¿Recuerda a la generación Xtar de 1945?, la famosa quinta generación- dijo Sara sacando una navaja.

-Sí, a eso iba- dijo el director- Todos nosotros peleamos en esa guerra, y uno de nuestros amigos nos traicionó…

-¿Windsburg?

-Sí, él fue nombrado capitán de la armada estadounidense tenía un tratado de proteger a su bandera, su país y su gente por lo que no logramos detenerle.

-Aun así usted formaba parte de El Eje Berlín-Roma-Tokio, está usted demasiado bien conservado como para tener más de 66 años de edad, y sus hijos no tienen más que dieciséis, ¿algún modo de fertilidad?, ¿acaso Ride y Rode son adoptados?

-¿Por qué estás tan interesada en la generación de 1945 Sara?, ¿Acaso hay alguien que esté…?

-Nadie señor Oda, nadie más que mi voluntad me obligan a preguntarle de esta información que solicito, pues influye el destino de mi NOVIO- dijo Sara impaciente pero relajada.

Flashback

-Akashi- dijo una voz masculina- eres mi amigo y mi hermano menor, nosotros, Erika y yo, tenemos algo que cumplir, por lo que debemos pedirte un favor.

-Lo que tú me pidas Kazuo, sabes que Erika y tú son como mis hermanos.

-Gracias, bueno, como sabes, Erika va a tener un hijo, y no podemos hacerlo crecer en este mundo lleno de guerra, por lo que debe irse a un tiempo de paz, tú sabes, que crezca sin odio- dijo Kazuo seriamente, algo raro en él desde el inicio del proyecto en 1940.

-Lo sé, tampoco quisiera que mis hijos crecieran con odio, ¿qué debo hacer?

-Akashi, voy a sacrificarme, así que por favor, cuida de mi esposa y de mi pequeño, por favor, no quiero que nadie sepa de quien es hijo, ni qué pasó con nosotros, pues si nos desconoce cómo sus padres, él formará su propio destino.

-Alguna especie de profecía que tenga que ver con el pequeño- dijo Akashi.

-No, ninguna, y creo que no la habrá, puesto que él es especial por el hecho de haber nacido, nada de lo que heredó de nosotros será de él y nada de lo que él posea será gracias a nosotros, él simplemente será quien es y si le da la espalda al mundo, no será el único capaz de protegerlo, el mundo debe protegerse a sí mismo, y mi hijo no se convertirá en el héroe de nadie…

-¿Entonces quieres que el chico forme su propio destino?, ¿quieres que él solo forje su propio camino?- dijo entre lágrimas Akashi.

-Sí, por favor, que no crezca con odio en su alma…

Fin del Flashback

-¿Por qué no pudo cumplir su promesa?- le preguntó Sara.

-¿Acaso tú…?

-No, solo deduje que algo había pasado, sus expresiones cambiaron al preguntarle de mi novio, así que conoce a los padres de Kyoto, dígame, algo, ¿cómo era mi suegra?- ahora el tono pasó de amenazante a dulce.

-Ella era una buena persona, pero se fue al sacrificarse por su hijo, no me quedó más remedio que dárselo a un viejo amigo, un simple llamado Víctor, Lence Víctor, él me dijo que lo protegería con su vida y…

-Ahora llegamos al punto que yo quería ver, ese tal Víctor le hizo un maleficio imperdonable a Kyoto, ¿sabe de qué atributos era Víctor Lence?

-¿Qué parte de “era un simple” no entendiste?, Víctor no poseía un atributo en especial, él solo era…- se quedó pasmado.

-Aja, él era…

-Atributos…

-Fuego y Bélico, por algo odiaba a Kyoto con su alma, y Kyoto también le odiaba.

-Nunca recibí ninguna noticia de agresiones a Kyoto- se defendió Akashi.

-Claro que nunca las iba a recibir, ¿en qué loco mundo alguien va a admitir públicamente que maltrata a un niño de 7 años casi a morir?

-¿Cómo sabes que…?

-Víctor Lence le arrancó las alas a Kyoto, y por esa razón es que Kyoto odia volar, por culpa de Víctor, mi novio debe ver como los demás alzan el vuelo mientras él se estanca en la maldita tierra.

-Kyoto tiene habilidades extraordinarias, algo que ningún otro humano puede tener…

-Melodi, Ride, Rode, Natsuki, Zentraedi, Windy, Mindy, yo… y así la lista seguirá, pues tengo entendido que si somos un éxito se expandirá el grupo…

-Si Kyoto no quiere volar deberá hacerlo, las batallas no solo se libran sobre un tablero de ajedrez, sino debajo de él, y por encima, y será un tablero con relieve inestable, si él quiere seguir sometido a la tierra…

-Escúcheme de una buena vez señor Akashi, si hay alguien que tenga responsabilidad de eso es Víctor Lence, y si hay alguien que puede ayudar a Kyoto a devolver sus esperanzas al aire somos nosotros, sus amigos.

-Déjame hablar con Víctor, me debe muchas explicaciones…

-Víctor ya no puede atenderle, Kyoto lo mató, a los mismo 7 años al recibir las marcas de maldición en su espalda, creí que era más listo.

-Me dijeron que Kyoto ya estaba más feliz…

-Era por mí y por sus terceros padres, los honorables Darío y Larissa Benetton, pero el dolor pasado no evito que su corazón se llenara de odio, tal vez haya acabado con Lence, pero la maldición que lleva en su alma, nadie se la quitara, las Llamas Sagradas Katekyo no son nada comparado con las Llamas Malditas de Lence, y créame- la chica levantó su blusa dejando ver unas marcas que parecían garras de dragón- Duelen mucho.

-¿Sara?, ¿acaso tú?...

-Kyoto me salvó esa noche, Lence trató de abusar de mí, a los 7 años, sus manos quemaban, su repugnante lengua raspaba mi piel, y su… su…- la mirada de Sara se tornó asqueada- esa cosa me repugnaba, quería alejarle de mí.

-Kyoto, ¿qué pasó con Kyoto?

-Llegó y golpeó fuertemente a Lence, dándome tiempo de correr mientras Lence lo atrapaba del cuello, esa noche lo denuncié pero al llegar al lugar, solo su esposa e hijo estaban muertos, calcinados, y a Lence lo encontraron en la fundidora donde trabajaba, totalmente tostado, y muerto, de Kyoto no supe más hasta unos años más tarde, nuestro reencuentro en la secundaria.

-Entiendo Sara, lamento no cumplir con mi promesa, pero era casi imposible para mí verlo, Lence no me lo permitía, lo lamento, ahora iré a…

-No, no lo haga, como un trato por haberme dicho todo eso, yo le digo que si Kyoto se llega a enterar de que hubo alguien que pudo salvarlo de su oscuridad, más oscura se teñirá su alma, y se irá, dejando atrás a todos, y eso incluye a sus amigos- dijo Sara más calmada.

-Entiendo, Sara, trataré de iluminar gradualmente el corazón de Kyoto, a Kazuo y a Erika no les gustará saber que he faltado con una promesa, gracias, pequeña, ahora bien, tu Nombre código será…

-Meredi, Meredi Inverna, hermana de Melodi Inverna, ya sabe, cosas de familia- dijo la castaña.

-Muy bien- Akashi tomó el comunicador- Señorita, necesito que de la Zona Experimental traiga los últimos genomas Inverna, los que corresponden a…

-Entendido señor Akashi, en un momento llevaremos el Genoma de Inverna, ¿sobre quien aplicaremos el genoma?

-El genoma ya lo posee, solo falta estabilizarlo, para lograr una completa transformación sin eliminar los poderes- dijo el presidente con ira.

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-Shade es Kyoto, no su traducción, sino que uno de los motes que papá y mamá usaban para referirse a Kazuo Katekyo, y prácticamente eres una viva imagen de ambos- dijo Ride.

-¿Eran geniales, es decir, la quinta generación?- preguntó Kyoto en la sala.

-Sí, más que geniales, combatir 5 años una guerra y lograr una unión matrimonial fue un excelente aliciente, Zentraedi, Ride, tu y yo formamos parte de los herederos de la quinta generación- dijo Rode sin evitarlo.

-Cierto, Zentraedi era hijo de Darío Schiffer, no es así, Lobo Guerrero- preguntó Ride.

-Sí, Darío Schiffer es mi padre, mi abuelo no lo conozco, pero ya está en las últimas.

-Debe ser genial pertenecer a una gran familia de la mafia italiana- dijo Kyoto con una sonrisa- es decir, mírate, fuerte, decidido, emotivo, feliz, muy feliz, eres impresionante hermano.

-Tú no te quedas atrás, miembro del clan más poderoso del universo, ni siquiera mi familia era así de fuerte- dijo Ride.

-Por cierto Zentraedi- Rode interrumpió- ¿Cómo te enamoraste de Natsuki?, ya sabes, los Schiffer y los Inoue estaban enfrentados por la guerra.

-Nada personal chicos, sí supe de eso, pero papá me dijo algo muy importante al enterarse de que Natsu-chan era mi novia, él me dijo que “Tal vez nuestras familias hubiesen peleado siglos, años, milenios y generación tras generación, pero si hay algo que debo agradecer, es que mi hijo rompa con ese conflicto”, y todo normal, sin conflictos, ¿algún problema con ello?, ¿eh, eh, eh?- dijo Zentraedi imitando la muletilla de su novia.

-No, ninguno hermano- dijo Ride tomando una taza de té- y dime Kyoto, Sara y tú, ¿cómo fue su historia?

-Eso ya lo saben, fue en ese momento tan incómodo en el que si no decía nada me arrepentiría toda mi vida, por culpa de cierta persona cuyo nombre no quiero decir pero empieza con Z y termina con Entraedi, hubo problemas de sana competencia entre ella y yo, luego ese mismo sujeto nos metió en el baño de mujeres y ahí fue donde nos hicimos novios, me sentí tan humillado ese día que juré y perjuré que no me acercaría a ningún baño de mujeres mientras estuviera con vida- dijo Kyoto para reír a sus anchas.

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Melodi estaba angustiada por Sara, ella aún no poseía los genes estables como inverna por lo que debía enojarse para poder activar sus poderes, pero más que eso, lo que pasó en el avión fue un trauma ligero, la cicatriz que Sara le hizo en su mejilla ya se había desvanecido, así como el dolor que le provocaba ver a Kyoto y a ella.

-Bueno, la felicidad de Kyoto es mi felicidad, no debo ser egoísta- dijo mientras se restiraba en su terraza.

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-Esto dolerá solo un poco Meredi- dijo la médico que llevaba parte del genoma de Inverna.

-Descuide, hábleme de usted, familia, hijos, no sé, una loca historia de amor- dijo Sara, ahora Meredi, con mirada enamorada.

-Pues, ¿qué quieres que te diga?, voy a cumplir tres años de novia con el amor de mi vida.

-Eso es raro, yo también tengo tres años con mi novio, y somos muy felices, pero dígame, ¿cómo se conocieron?

-En la universidad, estudiaba en la biblioteca, cuando decidí tomar un libro, al llegar a las estanterías, él me vio fijamente mientras reía, pues trataba de alcanzar un libro que estaba lejos de mí, me estaba frustrando.

-¿Y luego?, se escucha tan romántico.

-Pues al yo tomarlo, él también lo tomó mientras me decía “Lamento llegar tarde, pero no pude despegar mi mirada de la tuya”, me sonroje violentamente y solo atine a decir gracias, iba cada vez más a la biblioteca para verlo, y él también me veía, y un día, rompimos la rutina.

-¿Qué pasó?- preguntó Meredi asustada.

-Me llevó al cine, fue genial, una hermosa película, y desde ese día somos novios- finalizó la chica mientras extraía la aguja del cuerpo de Sara, ahora llamada Meredi.

-No dolió nada- se quejó la ahora peliazul.

-Lo sé, encantos míos para hacerte una Xtar feliz- dijo la enfermera saliendo de la sala de juntas.

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-Chicos- dijo Akashi- permítanme presentarles a la segunda Inverna del equipo, Meredi.

Una chica de cabello azul, ojos ligeramente perlados y con una sonrisa coqueta descendió de las escaleras para ver a su amado.

-Kyoto- dijo ella al verlo- Lo logré, soy parte del equipo- dijo mientras corría a abrazarlo.

-Te ves hermosa, digna de los ojos que no serían capaces de dirigirte una mirada más de tres segundos- dijo el pelinegro mientras sacaba un collar.

-Ahora sí mi amor, a ser felices-

-Sí, a ser felices.