Capítulo
56: Salida de Belladona
Tomaron
la ruta norte de Belladona, que se dirigía a Hefestos, una de las naciones
grandes de The Fantasy.
La
distribución geográfica de The Fantasy era extensa, dos gigantescas masas
terrestres, una de ellas contenía a 4 de los Grandes Reinos, Belladona, que se
encontraba al extremo noroeste del gran continente, adueñándose de los
Paralelos Tropicales, dando como resultado el agradable clima tropical, alto en
niveles de humedad y una gran temperatura que favorecía el turismo en la playa,
al sur de Belladona se encontraban cuatro reinos menores, Kingslanding, Antioquía,
Biseland y Ur.
Por
su parte, Hefestos se encontraba justo al este de Belladona, abarcando desde
los trópicos hasta los círculos polares, haciéndolo de un clima mixto, cuya
población se concentraba al norte, en la ciudad de Hefestos, cuyos pobladores
eran los enanos, grandes en la forja de armas y herramientas así como valientes
guerreros, y el reino menor de Norwind se encontraba en el noreste de Hefestos..
Al
este de Hefestos se encontraba El mar de la Serenidad, un amplio mar rodeado
por el país antes mencionado y por Silkland al este, éste país de grandes
proporciones era líder en producción de telas y armas de la más alta calidad,
por lo que sus exportaciones eran una excelente fuente de ingresos al gran
país, que contrastaba con el poder militar al ser un país pacífico, al noroeste
de Silkland se encontraba Gruunland, Reino Menor que formaba un estrecho con Norwind,
estrecho que daba paso al gran Mar de la Serenidad.
Ubicado
al sur de Silkland, se encontraba Mythland, un país gigantesco que atravesaba
de trópico a trópico, siendo un país de clima cálido y lluvioso, de acuerdo con
la geografía del país, gran parte de los habitantes son seres mitológicos y
seres extintos que hicieron de aquel país su hogar, al sureste del gran
continente, y al sur de Mythland, se encontraban los Reinos Menores de Kalos,
Drakengard, Beta Nova, Alfa Nova, Cluth, Liberty, Alysio y Titanos
Finalmente,
al sur de todos los países, el más grande de todos, Cydonia, que dominaba el
sur-suroeste del Gran Continente, con acceso al círculo polar austral y al trópico
austral, dando un clíma mixto, pero agradable, y al norte de Cydonia, el más
grande de los reinos menores, Olympia
Sin
embargo, había un lugar que se había expandido, un territorio cuya política se
encontraba manchada de corrupción y sed insaciable de poder, Citizen Kingdom.
En
aquel reino, los Elfos y Enanos poseídos por la oscuridad y no tuvieron cabida
en sus países natales, habían nombrado Citizen Kingdom como su esperanza para
progresar, pudiese ser que, separado del Gran continente por el gigantesco océano
que alimentaba dos lagos, el Lago Ira, alimentado por el rio Boreal al norte, y
el Lago furia, alimentado por el río austral.
Citizen
era tan grande como el gran continente, pero se dividía en dos sectores,
Citizen del Este, un país cuya actividad económica era la producción campestre,
como agricultura y ganadería, y Citizen del Oeste, país cuya principal actividad
económica era la industria y el comercio, ambos sectores separados por dos
grandes cordilleras, la Magna al norte en el territorio del Oeste y la cordillera
Suprema, parte del territorio del Este, y el único contacto entre ambos sectores
era el Lago Furia.
El
país era tan grande que…
-Para
declarar la guerra a Citizen debemos hacer que las Cinco Grandes Naciones
trabajemos juntas- masculló Kazuo con pena- ¿ACASO PENSABAS DECLARAR LA GUERRA
A UN PAÍS DEL TAMAÑO DEL CONTINENTE ASIATICO TÚ SOLO?
-De
hecho, no iba a estar tan solo, mis amigos y mi familia me iban a apoyar con la
invasión- dijo el joven azabache como si nada.
Kazuo
se había enterado de los planes de Kyoto debido a una fiesta de despedida que
se había realizado la noche anterior, desafortunadamente para Kyoto, las cosas
se salieron de control pues Riot y Zentraedi se pasaron de copas y contaron la
segunda fase de la misión, esa noche, Kazuo y Kyoto se enfrascaron en otro
combate.
-Lo
bueno es que todo salió bien y Kazuo entendió completamente la misión, y él
también quiere destruir Citizen- comentó Erika con calma- Al final de todo,
fueron muchos problemas mientras estábamos aquí.
-Ya
veo- comentó Kyoto- Bien, Creo que no estoy tan solo como pensé, y podemos
destruir Citizen sin dejar piedra sobre piedra.
-Aunque
podríamos llegar a un acuerdo de paz- explicó Zentraedi.
-Hermano,
pregunta cuánto ha costado mantener la paz con Citizen- dijo Kyoto con calma.
-¿Cuánto
ha costado mantener la paz con Citizen?- preguntó el albino al azabache mayor.
-Nada,
realmente nada.
-Lo
vez, es fa…
-Nunca
firmamos un acuerdo de paz- comentó el azabache como si nada- Por eso es que
vamos a destruir Citizen y devolverlo a su ambiente Natural, ¿sabes por qué
tenemos pactos de no agresión con las otras naciones?
-No.
-Porque
al llegar las otras grandes naciones desde Citizen, Belladona era un reino
gigantesco, así que las tierras se dividieron en los cinco Grandes Reinos, y
Citizen, en su deseo de expandir más su territorio, quiso adueñarse del resto
de los países- explicó Kazuo mientras seguían avanzando.
-Oh,
y el pacto de no agresión es porque ningún país iba a estar de lado de Citizen,
¿cierto?- preguntó Zentraedi.
-Sí,
así es, por eso necesitamos firmar esa alianza, crear The Fantasy Association.
Iban
saliendo de la ciudad, despidiéndose de la gente que se había enterado del
largo viaje que traería al mundo la paz que necesitaban todos.
Las
compuertas de Acero Forjado se abrieron ante la salida de la primera asociación
de The Fantasy que iba por dos cosas, buscar la paz y declarar una guerra.
-Que
contradictorio- comentó Ashura- Guerra para una paz, llevo casi 40 años
entrenando mis poderes para estar bajo la orden de un enano con conflictos
mentales.
-Ashura,
tío, por favor, no me diga que usted tampoco quería venir a esta aventura
maravillosa- comentó Kyoto- Todos aquí estamos seguros que, si Citizen trata de
detenernos, podremos pararlos con solamente un dedo
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-Reino
de Citizen- comentó un hombre de abundante barba cana- Hoy es un día Glorioso, pues
he enviado a miles de espías en los Cinco Grandes Reinos, dentro de poco
tiempo, TODA THE FANTASY SERÁ NUESTRA- habló el rey por un micrófono- Ahora,
gran pueblo, es hora de tomar las armas y…
-Mi
señor, un ente extraño solicita hablar con usted- comentó un consejero.
-Más
tarde- susurró- Estoy totalmente inspirado.
-No
se puede más tarde, le urge hablar con usted, mientras tanto, si me permite
pasar a su lado…
Y
cayó con lentitud, con una terrible herida sangrante que le perforaba el
abdomen.
-Te
dije que ahora, Rey Fausto- comentó un ente con un taladro en lugar de su mano.
-Lord
Destiny- el Rey se inclinó- No esperaba verlo de nuevo por aquí.
-Pues
aquí me tienes inútil, tantos años te mantuve con las puertas abiertas para
conquistar Cydonia y los demás reinos, y solo has hecho el ridículo.
-Mi
señor, hice una guerra, pero Belladona ya había perfeccionado el uso de las
nanomáquinas, no pude hacer nada para…
No
pudo continuar, pues el brazo de Destiny le atravesó el abdomen, provocando
caos entre los asistentes a la Reunión de Citizen.
Ante
el bullicio, 8 entes rodearon la ciudad y crearon un cerco, manteniendo dentro
a los habitantes del reino.
-SILENCIOOOOOOOOOOOOOOO.
Los
habitantes del reino mantuvieron el silencio, mientras el ente aplaudía.
-Veo
que sí les han enseñado como mantenerse ante un verdadero Rey- comentó con
soberbia mientras se colocaba la corona- Ahora inútiles, tengo algunas cosillas
que expresar de este pésimo desempeño gubernamental, desafortunadamente fuimos
exiliados, por comprender el aura en su totalidad, porque solo se nos enseña el
Aura Positiva, el aura Creativa y de la Iluminación, mientras tanto, se omite
el Aura Negativa, el Aura Destructivo y de las Sombras, ese es el verdadero
Aura, el que nos puede salvar de lo que nos ocurra.
El
pueblo calló, la mayoría de sus habitantes, en su búsqueda de los secretos del
Aura, habían sucumbido ante el Aura Negativa, convirtiendo su estructura, los
elfos, altos y hermosos, se convirtieron en Elfos Oscuros exiliados de
Mythland, los Duergar, cómo eran llamados los Enanos Poseídos por la oscuridad,
de igual forma, en su ambición por forjar con los metales Oscuros, habían
sucumbido ante la misma oscuridad, de ahí que fueron exiliados.
-Y
ahora, El conocimiento de El Aura Negativa nos dará lo que anhelamos tanto, el
dominio de este mundo, The Fantasy será Nuestra- gritó el líder de Citizen
Kingdom mientras izaba una bandera.
El
reino entero se llenó de júbilo ante la revelación del nuevo Rey de Citizen,
quien se había ganado todas las esperanzas del reino.
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Al
ir avanzando, por la ruta Norte de The Fantasy, directo a las Tierras Heladas
del Norte, llegó la noche, y decidieron acampar antes de seguir el trayecto al
reino de los enanos.
-Hace
frío- comentó Natsuki mientras se abrazaba a ella misma.
-Ven
enana- comentó Zentraedi abrazándola- Te congelarás, toma esto.
Sacó
su chamarra que siempre cargaba, quedando él con una simple camisa.
-No…
no… te enfriarás tú y…
-Te
estoy abrazando, eso me mantendrá calientito.
-Solo
espero que La ONU no la cargue contra el escritor- masculló Riot.
-Oh,
cierto, mejor te dejo en paz, pero quédate la chamarra.
-Ok…
Y
continuaron avanzando, buscando un lugar claro donde acampar. Kyoto saltaba por
los árboles mientras el resto se mantenía en tierra firme.
De
repente, unos crujidos sorprendieron al equipo, mientras Kyoto ya había bajado
a tierra firme.
-Fuera
ABAJOOOOO- gritó el azabache.
Y
enormes troncos caían al suelo, mientras Kyoto sacaba sus espadas.
Rodeó
los troncos con ellas, y al caer, se fueron apilando sobre una lona blanca
gigante con símbolos extraños.
-Sellado:
Locker
Y
los troncos desaparecieron, quedando dentro de una pequeña bolsa.
-Tenemos
que dormir, andando- masculló el azabache mientras tomaba la bolsa.
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-Es
extraño- comentó Zentraedi mientras se acercaba a la fogata.
En
un claro del bosque helado-tundra, habían elegido precisamente ese lugar para
dormir.
Kyoto
y Kazuo habían sacado un par de guitarras para hacer más llevadera la noche, a
su vez que Riot y Akashi se habían ido de cacería.
-¿Qué
es tan extraño?- preguntó el joven azabache mientras afinaba su guitarra.
-Hace
un momento estábamos perdidos en el bosque y ahora tenemos un lugar donde
dormir con tranquilidad.
-Ah,
te explico, ligeramente arriba, hay una línea punteada, eso indica un corte
entre fragmento y fragmento de la historia, ¿entiendes?
-Oh,
ya veo…
-Ahora
solo queda esperar a Riot y Akashi para que lleguen con la comida.
-De
hecho, ya llegamos- dijo un joven castaño cargando tres jabalíes gigantes, con
un lazo donde tres crías estaban amarradas.
-Provecho
lobito- dijo burlescamente Kyoto viendo a Zentraedi.
-Traigo
más- comentó el adulto castaño cargando 5 jabalíes gigantes y 4 aves Roc.
-¿No
esos pollos gigantes se habían extinto?- preguntó Zentraedi.
-Sí,
y no, cuando llegó Dios a la tierra, vio a los dinosaurios y dijo “A la mierda
de aquí que arruinan mi historia”- comentó el azabache mientras hacía ademanes
de grandeza- Y ellos emigraron a este lugar.
-Oh,
ya veo- dijo Riot mientras sacaba un tronco enorme de la pequeña bolsa.
-Ahora,
como dijo Jack el Destripador, Vamos por partes- Kyoto sacó sus espadas- La
limpieza, yo me encargo.
Y
se llevó a los cadáveres de los animales al río, mientras asentía en dirección
a Melodi, para que le siguiera.
-Dejame
adivinar- comentó el Albino una vez solos- Otras líneas punteadas.
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Ambos
caminaban con calma por el claro que habían encontrado, hasta llegar a un
pequeño barranco.
-Bien
Inverna, mira atentamente- comentó el azabache mientras tomaba una espada
corta.
Y
enterró el cuchillo en la garganta del animal, y de ahí bajó hasta el rabo
gigantesco del jabalí, abriéndolo por la mitad.
-Ahora.
-Acua-shot.
La
chica arrojaba un chorro de agua a presión, mientras el azabache metía sus
manos sacando vísceras, órganos incomibles, mientras seguía limpiando con un
pequeño cuchillo.
-Limpio-
explicó mientras dejaba al cerdo gigante a un lado- Pequeña Inverna, faltan 6.
La
chica estaba asqueada, al ver el montón de vísceras.
-Y
las crías.
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Llegaron,
la chica con ligeros síntomas de nauseas, y el azabache contento, después de
tiempo de limpieza.
-Cortemos
la carne- comentó Kyoto poniendo una pierna del Jabalí sobre dos varillas- una
vez cocida, claro está.
-Me
pregunto qué habrá visto Melodi- Preguntó Natsuki mientras veía a su amiga con
preocupación.
-¿Pues
qué más?, el chico que le gusta estaba sacando vísceras de jabalí en frente de
ella, tomó a los jabatos y también los mató- dijo Stella con furia- ¿No te dije
que los jabatos no, cielo?- dijo iracunda viendo a Riot.
-Sí,
sí me lo dijiste, pero no podía dejarlos huérfanos- se defendió el castaño-
Además ya pasaron a mejor vida.
-¿Y
si estaban en peligro de extinción?
-Nah,
había como miles de ellos- comentó el castaño- Y me hice un collar con los
rabitos.
-Eres
un…
-Y
te hice uno a ti…
-Ay
amor- suspiró la chica de hebras zafiro- Gracias…
Todos
estaban alrededor de la fogata que Kyoto había encendido, mientras esperaban la
carne a preparar.
-¿Cuánto
falta para llegar a Hefestos, Padre?- preguntó el joven azabache con calma.
-Un
día, espero tengas algo que decir, joven líder- comentó el adulto azabache
-Ya
lo tengo, un discurso amistoso, así que no hay nada que ocultar, mi señor…, así
que hablaremos directamente con el rey de Hefestos, y de ahí veremos que pasa-
comentó el azabache mirando al cielo.
-No
te ves muy animado, Kyoto- dijo Ashura mientras se acercaba a la fogata.
-No
es eso, me preocupa, hay muchas cosas que podrían interferir con nuestra
misión- masculló el azabache con molestia- Yusei en sus deseos de venganza, yo
también quiero destruir Cydonia, pero su método es…
-Es
Yusei, si hubieran acabado con Belladona, hubiéramos reaccionado de la misma
forma, ¿qué propones hacer con él?- preguntó el adulto albino.
-Pensaba
en reclutarlo para el ejército, pero Yusei tiene madera para algo más grande
que ser un simple soldado o mercenario.
-¿Estás
pensando lo que creo?- preguntó Akashi acercándose a la conversación.
-Lo
nombraré el representante oficial de los Reinos Menores, simplemente no puedo
dejarlo de lado con todo lo que pasó, su país fue invadido, y si lo regresa a
sus manos, podremos aliarnos con él.
-¿Qué
pasa si se muestra contrariado ante la propuesta.?
-No
podrá, sabe lo que pasó con su reino y su familia así que, conociéndolo,
impedirá que otros reinos caigan como lo hizo su país.
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Un
chico de cabello azabache, acompañado de una castaña ligeramente más chica, se
dirigía a las ruinas de lo que era su país, mientras veía con dolor los
escombros que había dejado la invasión.
-Yusei,
¿pasa algo?
-¿Crees
que hacemos lo correcto, Sora?- preguntó el joven mientras miraba su país hecho
trizas.
-Sí,
y no, Yusei, la razón, es que creo que tomaste el camino incorrecto, pero como
tu hermana, te seguiré inclusive al mismo infierno- comentó la chica.
-¿Qué
propones hacer pequeña Sora?
-Para
empezar, dejar de decirme pequeña, y dos, buscar al idiota de Kyoto y Kazuo,
ellos demostraron su inocencia en los actos, y nos dejaron libres a pesar de
ser prisioneros de guerra, ¿qué te demuestra eso?
-Integridad-
aseguró el azabache- Tienen lo que otros reinos no tienen, pero si queremos
hacer que ellos estén de nuestro lado…
-Lo
estarán Yusei, Citizen ha hecho demasiado daño.
-¿Cuál
es la última noticia que tienes de ellos?- Preguntó Yusei motivado.
Sora
cerró los ojos y se quedó inmóvil por un rato, sus parpados se tornaron color
verde.
-Los
encontré- dijo la chica abriendo los ojos- Se encuentran en un claro del Bosque
Helado, rumbo a Hefestos.
-No
se diga más pequeña, vamos por ellos.
-Sí,
vamos- dijo la chica acercándose a Yusei y pateando la entrepierna dijo- Y que
dejes de decirme pequeña.
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