Capítulo
101: Kyoto vs Dommino Parte 1
Melodi
se encontraba prisionera dentro de una gigantesca torre, mientras un ente le
vigilaba de cerca.
-
¿Estás asustada? - preguntó este ente sin emoción alguna.
-No,
no lo estoy.
-
¿Por qué?, no soy de seguir órdenes, ¿lo sabías?
-Sí,
lo sé- contestó la chica con toda la calma que pudo.
-A
pesar de que mi misión es cuidarlas, a ti y a tu hija, podría matarlas como
quisiera.
-Lo
sé, pero sé que no harás nada con nosotras, porque Kyoto-kun te detendrá.
-AH,
lo veo, así que confías en ese tal “Kyoto”, ¿cómo diablos podría él vencerme?
-Te
derrotará solo porque es Kyoto, nada más.
-
¿Solo porque es él?, necesitas explicarme de manear más contundente, solo
porque es él, en cualquier caso, yo, solo por ser yo, te mataría ahora, así que
dame otra explicación.
-Bien,
te lo diré de otra forma, no soy la chica clásica del cliché de quedarme callada,
ser sutil y amable, así que te lo diré al estilo de mi novio.
Y
tragó duro antes de hablar, en realidad sí estaba aterrada, aterrada por su
hija, que estaba encerrada en aquella capsula, y la veía llorar.
-Prepárate
a que Kyoto-kun patee tu maldito trasero, te haga mierda y te destroce lenta y
dolorosamente, te romperá la mente, te torturará y dolerá demasiado, suplicarás
la muerte para salvarte, y él en su infinita misericordia te destrozará el
cuello, y serás libre del dolor- explicó la chica con una sonrisa sádica en su
rostro.
Aquella
entidad le vio con serenidad, pero con algo roto en su mente. Sabía que raptar
a la niña y a la chica les hacía un favor a sus intenciones. Y sabía que, por
ese acto, podría terminar muerto.
Pero
era la misión de su maestro. No podía fallar.
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Aterrizó
en la isla, mientras sacaba la Guitarra, caminando con lentitud hasta quedar
frente a una gigantesca puerta de metal
-Atributo
Fuego…- Sacó su guitarra mientras la cargaba con aura de fuego- Riff Ígneo.
Y
la rasgueó, creando ondas de fuego que impactaron la gigantesca puerta, que iba
cediendo poco a poco.
Cayó
la puerta, destrozada tras los poderosos impactos de la guitarra en llamas de
Kyoto. Tras ella, estaban algunos guerreros de la secta de Olimpiacos.
-Esto
se va a descontrolar…
Y
tomó nuevamente su guitarra, prendiéndola en llamas.
-Infernal
Riff- gritó Kyoto mientras ondas de fuego emanaban de su guitarra.
Los
guardianes de la torre caían con severas quemaduras, aún recibiendo los golpes
de la guitarra.
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-Allá
está, esa es la torre…- dijo Natsuki parada sobre la playa
El
espectro púrpura salía de su hombro, mientras veía consternado la escena.
-¿Estás
segura que es esa torre, ama Natsuki?
-Sí,
es más que seguro, el idiota de Kyoto acaba de destrozar toda la torre, Y QUE
NO ME DIGAS AMA…
-Señora…
-NO
-Natsuki…
-EXACTO…
-Sus
deseos son ordenes ama…
-Me
lleva… Bueno, ¿puedes detectar donde están mi amiga y la niña?
-Sí,
me llevará un segundo.
Y,
lo dicho, en un segundo estaba de vuelta, con la cara pálida.
-Está
a media torre, pero lo que vi en el camino… Natsuki, no te recomiendo entrar…
-No
me des órdenes, yo soy tu ama- dijo la rubia mientras avanzaba, dejando al ente
con una mirada de enojo.
-Que
no, y que sí, y que no, y que siempre sí, ¿es que todos los Inoue son iguales?-
se dijo mientras avanzaba, refunfuñando.
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-¿Dónde
está ella?- Preguntó a uno de los demonios que estaban peleando.
-En…
el calabozo, a mitad de la torre- comentó un ente ya casi calcinado, con las
extremidades cortadas y cauterizadas por el fuego.
-Bien,
te dejaré vivir, ahora debo irme.
Y
comenzó a subir las escaleras, mientras pensaba en los momentos que comenzaba a
pasar con Melodi Inverna y con su hija, quienes estaban atrapadas arriba, a
media torre, esperándolo.
Y
tomó velocidad, mientras su cuerpo se cubría de llamas.
-Atributo
Fuego: Ignito del Destino- masculló mientras se abalanzaba por las escaleras.
Si
no se apresuraba…
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La
chica gritó, siendo arrojada dentro del castillo hacia uno de los muros,
mientras Kazuha veía la escena, asustada.
-Maldita
zorra.
El
ente tenía un par de varillas de fuego con una marca en la parte inferior.
-Si
quieres vivir, deja de ser tan…
-Insolente,
malcriada, llorona y berrinchuda- exclamó una voz desde el fondo.
-¿Eh?...
¿Cómo lo supiste?
-Llevo
con ella un corto tiempo de relación, pero una larga vida conociéndola, es mi
novia, maldito inepto.
-Ah,
ya veo, así que tú eres el mítico KYOTO-KUN…
-Solo
una persona puede decirme de esa manera, y esa persona es mi novia, Dommino
Caricci.
-Tal
vez sea así, de cualquier forma, solo eres un estorbo en esta misión, Disparo
Vacío.
Domino
señaló con un dedo, mientras Kyoto veía con duda, hasta que un golpe le envió a
un costado de la torre.
-Dommino
Caricci, Mejor Conocido como “VACÍO”, estoy hueco, no siento nada ni pienso
nada, no soy nada…
-Kyoto
Katekyo, El Nihilista.
Y
Domino lanzó un rayo, que impactó a Kyoto en el pecho, seguido de una corriente
que le impulsó hacia la azotea de la torre.
-¿Eso
es todo lo que tienes?- preguntó el joven Katekyo tomando su guitarra-
Necesitas más para derrotarme, Ráfaga oscura.
Una
oleada de sombras se dirigió con velocidad al ente con velocidad, mientras
Dommino solo veía con calma a su alrededor.
De
las sombras, Kyoto salió disparado hacia la pared, mientras las sombras de su
técnica se dispersaban.
-Lento,
pude ver ambos movimientos, casi a la par, dime, ¿creíste que podrías vencerme
con eso?, sé que puedes dar más de ti Kyoto- comentó Dommino mientras caminaba
hacia él- ¿Por qué estás sonriendo?
-Porque
ahora me estás viendo como un rival, cuando antes me veías como una basura.
-Desafortunadamente
sigues siendo una maldita basura- dijo Dommino mientras sacaba su espada- Y yo
te degrado, a un nivel insignificante de un miserable bicho.
Dommino
se cubrió de una inmensa aura oscura, mientras el rostro de Kyoto no mostraba
ninguna expresión. El chico solo se cubrió de igual forma en un aura oscura,
mientras sacaba la guitarra que tenía en su espalda.
-Siente
el Aura: Atributo Oscuridad: Sonido Estridente.
Rasgueó
su guitarra, provocando que el ente se cubriera los oídos, y aprovechó eso para
asestar un potente golpe con su guitarra, alejándolo de la chica.
-Atributo
Fuego: Explosión.
Arrojó
una bola de fuego que impactó sobre Dommino, llenando de humo la habitación
donde peleaban.
Kyoto
aprovechó para acercarse a Melodi e intentar quitarle los grilletes con su
espada, pero…
-Ni
te atrevas- dijo Dommino saliendo del humo, con unas varillas de metal con una figura.- O ella pagará las consecuencias.
Y
apuntó aquellas gigantescas varillas de hierro a Kazuha, a quien tenía
aprisionada bajo su pie, boca abajo, con la espalda descubierta.
El
chico sólo se detuvo, mientras guardaba su guitarra.
-Eso
es, así es como quería tenerte, creí que representabas el nihilismo, pero ya
veo que me equivoqué, aún hay sentimientos dentro de ti- dijo Dommino- Mientras
el nihilismo lo niega, el vacío realmente lo desaparece.
-Cobarde-
dijo el chico con una sonrisa.
Los
jadeos de cansancio del azabache inundaban el lugar silencioso, mientras
Dommino seguía de pie, sobre Kazuha. Y Kyoto desapareció de la vista para
encontrarse con Dommino de frente.
-Suéltala-
dijo el chico mientras le rompía el brazo.
El
brazo roto obligó a Dommino al soltar a Kazuha, mientras con el otro brazo, el
que tenía su espada, se dirigió hacia el chico.
-Onda
Vacío.
Y
proyectó a Kyoto hacia uno de los pilares que sostenía la torre Olímpica.
-Nunca
podrás derrotarme, tu destino fue marcado por tu mera existencia, un simple
accidente que nunca debió llegar a estas circunstancias, tú debiste morir el
día que el caos se desarrolló en el otro mundo.
-Desafortunadamente
el destino para mí no está escrito, y mi existencia no es un accidente,
Atributo Oscuridad: Pulso Umbrío.
Una
serie de sombras se concentraron en el brazo de Kyoto, arrojándolas a Dommino,
quien sólo sacó su espada, para evitar el impacto directo.
Kyoto
se dirigió por un costado, mientras sostenía su guitarra nuevamente.
No
se dio cuenta en el momento que Dommino sólo apunto hacia él, para volver a
dispararle esa extraña onda.
-Volviste
a caer, confiado en tus habilidades- comentó el ente que mostraba una
superioridad aplastante.- Onda Vacío.
Y,
de nueva cuenta, Kyoto salió disparado hacia las paredes de la torre,
rompiéndolas en pedazos.
-Aun
así, no me voy a dar por vencido, te derrotaré así sea lo último que haga,
Dommino, Atributo Oscuridad- dijo el azabache mientras flotaba.
-Lento-
dijo el ente, volando debajo del azabache- Pulso Vacío- Masculló Dommino.
Y
lo impactó, llevándolo a lo alto de la torre, haciendo que, por la altura,
cayera brutalmente contra el suelo, rompiendo la armadura de aura.
-Maldito
seas- masculló Kyoto volviendo a cubrirse de aura negra.
-Hagas
lo que hagas es inútil, nunca ganarás contra mí- comentó Dommino- El Nihilismo
sólo se basa en la negación de las emociones, el vacío, como lo indica su
nombre, es la nada.
Y
volvió a la carga contra Kyoto, quien solo se cubrió con la espada que tenía a
la mano.
Pero
Kyoto no se esperaba que esa espada se rompiera, permitiendo a Dommino alcanzar
su cuello, arrojándole hacia una de las columnas de nueva cuenta.
Kyoto
se levantó, mientras las heridas en su cuerpo ya se notaban cada vez más.
Corrió hacia Dommino, cubierto en llamas, mientras hacía unas señales con sus
manos.
-Atributo
Fuego: Envite Bengala.
E
impactó contra Dommino, arrojándole a una de las columnas que estaban rodeando
la sala de batalla.
-No me
vas a derrotar, no así, para ti los sentimientos son un desperdicio, pero para
mí, son lo más sagrado que puedo tener, vínculos que proteger, por eso estoy
aquí, más que por mi nihilismo, sino por lo que no he negado.
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